Río Grande tiene (cada vez más) innumerables historias de jóvenes que demostraron su capacidad y su ingenio, logrando grandes éxitos en su vida laboral y profesional, aunque no sin esfuerzo, sacrificio y un temporario alejamiento de la familia, difícil de sobrellevar. El caso de Ramiro Fayanás es uno de ellos, y lo contó con emoción y orgullo en la tradicional columna «Chicos que crecen» , un clásico del programa «Un gran día», por ((La 97)) Radio Fueguina.
Ramiro Fayanás es licenciado en Administración de Empresas y a fuerza de ingenio y creatividad se ha convertido en un exitoso empresario del vino.
Nacido en Río Grande, el joven devenido empresario comentó que dejó su hogar a los 17 años para estudiar en Buenos Aires, donde pasó seis años en la U.A.D.E. A pesar de los desafíos que enfrentó desde el inicio, su determinación y su deseo de crear algo propio lo llevaron a construir una carrera valiosa en el competitivo rubro del vino.
Comenzó desde cero, sin auto y con recursos limitados, pero con una firme visión de lo que quería lograr.
“Yo me fui de Río Grande para estudiar en Buenos Aires y empecé desde la nada, encontrando un vino en un supermercado”, relata Ramiro. Esta casualidad se convirtió en una pasión que lo llevó a profundizar en la comercialización del vino.
“Poco a poco, la verdad es que todo fue súper desde abajo. Fui conociendo a las personas adecuadas y aprendí de mis errores”, confiesa.
“No tenía ni auto cuando empecé y después todo fue siguiendo sus procesos naturales», comentando que logró comprarse un vehículo, con casi sin recursos. Asimismo, resaltó que su familia, que se encontraba en otro rubro, lo apoyó desde el inicio, «más que nada en la parte emocional, porque es duro construir algo desde abajo», confesó.
Con el tiempo, estableció una base operativa en Olavarría y comenzó a trabajar con marcas propias. Hoy en día, Ramiro cuenta con ocho marcas en el mercado y una empresa en España, consolidando su presencia también en el mercado internacional.
“Lo difícil en este rubro es que confíen en vos y en tu proyección”, indicó, aunque su historia demuestra que la confianza se construye con responsabilidad y dedicación.
La familia Fayanás ha desempeñado un papel fundamental en su trayectoria. Su padre, quien cofundó el diario El Sureño, le inculcó desde joven un sentido empresarial que ha sido clave en su carrera.
Su reciente visita a Río Grande evocó emociones profundas: “Al llegar al aeropuerto y ver la plaza me emocioné, lo extrañaba mucho”, se sincero Ramiro. En tanto, en diálogo con Marita Romero señaló que su visita a su Provincia natal no fue casualidad, ya que arribó con un gran objetivo: Establecer un vínculo comercial, ya que acordó el comienzo de un trabajo con una distribuidora local.
Ramiro recordó que cuando comenzó a transitar en la carrera, lo hizo con el objetivo de trabajar en medios de comunicación, pero todo cambió cuando el destino le puso en frente el poder ser vinatero. «Todo me fue llevando para que sea genuino y hoy tiene un valor muy alto», destacando nuevamente que cuenta con ocho marcas de vino en el mercado. «Tengo una empresa en España», a raíz de que «tenemos una buena estrategia de comercio exterior para trabajar», indicó orgulloso el joven riograndense Ramiro Fayanás, quien hoy en día creció, convirtiéndose en un gran empresario.
El audio que acompaña estas líneas da testimonio de la convicción, la visión empresarial y el orgullo de uno de los tantos jóvenes fueguinos que son modelo para su generación.
Comentarios