Efectivos de la Policía Provincial irrumpieron anoche en los domicilios particulares y consultorio profesional de los dos médicos que deben ser sometidos a juicio en una causa por presunta mala praxis.
Se trata de los doctores Raúl Gerónimo Rauch y Juan Carlos Montenegro Martínez, sobre quienes pesa una acusación por «lesiones gravísimas culposas», a raíz de un hecho acaecido hace 10 años y que terminó con una mujer sufriendo un accidente cerebro vascular (ACV).
Los dos profesionales debían presentarse el lunes pasado en Tribunales para un juicio contrarreloj: es que la causa (que ya tuvo incluso un sobreseimiento) está a punto de prescribir y esto hizo que incluso tenga «prioridad», llegando a posponer otros procesos que tenían que iniciarse esta semana.
Pese a la citación, ni los dos imputados ni sus abogados defensores se hicieron presentes en la sala de juicio, por lo que fueron declarados en rebeldía y se solicitó su captura nacional e internacional.
En ese marco, la jueza a cargo del proceso, Cecilia Cataldo, ordenó allanar los domicilios y los consultorios profesionales de Rausch y Montenegro, medida que se cumplió parcialmente, en virtud de que el último de los nombrados comparte consultorio con otros profesionales, por lo que el allanamiento quedó en suspenso.
Tras el procedimiento, se informó que no se obtuvieron pistas respecto del paradero de los prófugos, por lo que se dispuso el secuestro de agendas, teléfonos celulares, computadoras y otros elementos considerados de interés, para la nueva causa que se ha instado contra ellos por “obstrucción a la Justicia” y “rebeldía”.
La búsqueda de ambos profesionales se realiza contrarreloj y se analiza ofrecer recompensa para hallarlos, debido a que la causa penal por “mala praxis” prescribe irremediablemente el próximo 27 de febrero, lo que anularía toda posibilidad de juzgarlos y, eventualmente, condenarlos por mala praxis.
No obstante, continuará vigente el incidente por “rebeldía” que derivaría en una nueva condena penal en su contra.
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