Carlos Sainz, bicampeón del mundo de rallies (1990 y 1992), sostiene que el Mundial ha perdido interés no sólo «porque la Fórmula 1 le ha comido el terreno», sino porque la FIA «ha preferido la cantidad a la calidad y ahora todo es muy soso».
El madrileño, uno de los pilotos más respetados, se ha mostrado muy ilusionado con el nuevo proyecto del raid Dakar en Suramérica, después de que este año se anulase por las amenazas de atentados. Sainz tiene confirmada su participación en el rally que se celebrará en Rumanía y Hungría, una prueba de siete días que se iniciará el 19 de abril y que concluirá después de cubrirse unos 3.000 kilómetros. Esta carrera es la versión europea del Dakar, que la organización ha debido programar después de la suspensión de la prueba africana. «La carrera de Hungría es la única que tiene confirmada el equipo (Volkswagen), aunque tengo muchas esperanzas de que también opte para el rally de Argentina y Chile. Parece que están animados y es un reto que a mí me apetece», destacó.
Hace unos días, la organización del Dakar confirmó que el raid más famoso del mundo se instalará con el mismo nombre a partir de la temporada que viene en el cono sur, donde del 3 al 18 de enero del 2009 Chile y Argentina albergarán la carrera. «No sabía cómo iba a reaccionar el equipo después de una situación tan dramática por la inversión económica realizada en el Dakar suspendido. Es normal que una marca se replantee cosas y también los patrocinadores. Lo que hacía falta era un poco de tranquilidad y esto es lo que ha habido. Ha habido cierta claridad y han empezado a aparecer los programas deportivos de las marcar para participar en raids», argumentó.
Ilusionado con el nuevo Dakar
A la pregunta de si se le cayó el mundo encima con la suspensión del Dakar y que ello podría haberle empujado a una retirada definitiva del mundo de la competición, Sainz respondió: «Sí, piensas en todo. Pero después de conocer que habrá un nuevo reto en Suramérica, eso anima mucho, aunque yo no tengo nada confirmado». «A mí me apetece ir a Argentina. Conozco el país y he corrido rallies allí. Es un país que da muy bien la bienvenida a todo lo que tiene que ver con el motor», subrayó.
Sainz ya es un veterano en las carreras de coches y, aunque ahora mismo no ve una fecha de retirada a corto plazo, lo que sí que tiene claro es no se pasará al mundo federativo. «Siempre dije que me plantearía mi futuro después del Dakar, pero este año aún no he competido. Un cargo político lo veo complicado. Soy una persona bastante poco política. Quiero ayudar al mundo del deporte. Ha sido mi vida. Todo lo que pueda hacer por el motor lo haré, pero un cargo en una federación no lo contemplo», destacó. «Tampoco en el Real Madrid, aunque no se puede decir categóricamente no a algo. Pero en este momento, tras la decepción y conocer este mundo, no es muy apetecible», añadió en relación a su experiencia en las elecciones en la entidad blanca.
De casta le viene al galgo
Quizá el futuro de su hijo, Carlos Sainz jr., le pueda dar profundidad en el futuro, después de que el pequeño participe este año en karting enrolado en el equipo propiedad del alemán Michael Schumacher. «No le tiran los rallies. A él lo que le gusta es la Fórmula 1. Ha madurado con Fernando Alonso y le ha impactado», aseguró.
Del mundo de los rallies, donde creció como piloto, Sainz tiene una idea crítica de cómo se encuentra en estos momentos el Mundial. «Lo que echo de menos es la variedad de ganadores. Con la retirada de Marcus Grönholm parece más fácil para Loeb, pero no hay que quitarle mérito. No es su culpa. Es de los mejores campeones de la historia. Sí que es cierto que en el Mundial de rallies ha habido años con siete aspirantes, con cuatro o cinco marcas diferentes. Hoy no ocurre. Para la competencia es triste», ha reflexionado.
«El punto de inflexión del cambio en los rallies llegó cuando la FIA empezó a querer asemejarlo a la Fórmula 1. Comenzaron a ir a la cantidad en lugar de la calidad. El rally, que era un evento que podía llegar a paralizar hasta un país, ha pasado a ser una carrerita de 40 coches con poca entidad y soso», añadió.
Los insultos a Hamilton
Finalmente, Sainz opinó sobre el incidente que se vivió cuando Lewis Hamilton fue insultado en el circuito de Montmeló. Carlos, que va vivido rivalidades en su carrera, tiene una idea muy peculiar de lo sucedido. «Lo que ocurre con un deporte como la Fórmula 1 es que ha alcanzado una popularidad que genera mucha dialéctica. Y este deporte da para lo que da. Cuando se pasa este límite, se empiezan a hablar de cosas extradeportivas. Al final, como siempre, en Montmeló serían dos o tres chalados. En este caso, considero que se magnificó porque les interesaba magnificarlo. En absoluto creo que sea un tema como para preocuparse», sentenció.
Fuente: Marca