Tras la condena a cinco años de prisión efectiva y diez de inhabilitación para manejar impuesta a Gustavo Ariel Hermosilla Bogado por el homicidio culposo de Maximiliano Draps (45) y Carlos Daniel Pérez (23), Natalia Bustos, pareja y madre de las víctimas respectivamente, se refirió en ((La 97)) Radio Fueguina al fallo judicial.
“Yo no perdí a mi hijo por cinco años, lo perdí para toda la vida, pero me pone contenta de que por lo menos se hizo justicia”, expresó. La mujer añadió que el establecimiento de todas las circunstancias del accidente le genera cierta tranquilidad.
El siniestro, ocurrido el 21 de enero de 2023, tuvo un punto final en el debate oral desarrollado esta semana en los tribunales de Río Grande.
Bustos relató que el hecho sucedió mientras la familia viajaba de vacaciones y se refirió a la causa del choque. “El viajar sin descansar es lo mismo que tomar alcohol”, imputó, recordando su declaración ante el juez.
Asimismo, destacó las contradicciones en el relato del acusado y mencionó que el testimonio de la pareja de Hermosilla Bogado fue un elemento que contribuyó durante el juicio.
Sobre el imputado, la mujer manifestó una profunda decepción por la actitud que mostró durante todo el proceso y su espera infructuosa por un pedido de disculpas. “Yo lo esperé, pero no lo hizo nunca. No lo hizo cuando tuvimos el accidente, no lo hizo en el hospital. Al contrario, se acercaron y agredieron los familiares de él”, detalló con pesar.
La mujer profundizó en esta falta de acercamiento, señalando que la familia del condenado nunca mostró empatía por el dolor causado. “Ellos no se acercaron ni siquiera a ver el daño que cometieron”, afirmó, revelando que en todo este tiempo, desde el accidente en 2023, no ha tenido ningún tipo de contacto o disculpa por parte de ellos.
Respecto al impacto emocional en su núcleo familiar, Bustos compartió las secuelas que persisten en su otro hijo, quien presenció la escena del trágico suceso. “Él estuvo dos horas conmigo, él vio a su papá y a su hermano en el estado en el que estaban, cuando bajamos del auto, y está con tratamiento psicológico hasta ahora”, concluyó.
La sentencia cierra un capítulo legal, aunque para Natalia Bustos y su hijo, la consecuencia de aquel día es una herida permanente.
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