En un contexto de creciente preocupación por la inversión en educación superior, el Gobierno Nacional anunció un aumento que, según el análisis de las organizaciones docentes, no representa un aumento real sino la acumulación de reajustes ya vigentes hasta noviembre. Así lo afirmó Fabio Seleme, presidente de la Asociación Gremial Docente de la UTN, en una entrevista realizada en el programa “Un gran día” de ((La 97)), Radio Fueguina.
“Por parte del gobierno nacional fue un anuncio engañoso de un aumento que no es tal porque en realidad lo que hizo fue decir que iba a haber un aumento del 7,5%, pero que era algo que ya estaba dado y que acumula digamos los aumentos desde agosto a noviembre”, dijo Seleme. “O sea no es que va a haber un aumento del 7%, sino que cuenta todos los aumentos que va a dar de acá noviembre y todos son por debajo de la inflación”, añadió, cuestionando además la confiabilidad de los indicadores oficiales.
El dirigente gremial sostiene que, en general, los reajustes universitarios siguen por debajo de la inflación, lo que se traduce en una pérdida sostenida del poder adquisitivo. “Vienen por debajo de eso y se consolida una pérdida del poder adquisitivo del 38%”, afirmó.
También advirtió sobre una “falta de presupuesto universitario” para 2025, similar a lo ocurrido en 2024, y señaló que la demanda de los docentes es, al menos, equiparar los salarios y el presupuesto a la inflación y a las proyecciones inflacionarias oficiales.
“Lo que estamos pidiendo es mínimamente equiparar a la inflación los salarios y el presupuesto”, remarcó Seleme, subrayando que la gestión de Milei «no solamente mintió ahora, ha mentido, viene mintiendo desde que asumió con el tema de las universidades».
“Este Gobierno no quiere universidades nacionales… va a tratar de eliminar las universidades no gratuitas o no aranceladas”, afirmó, atribuyendo a las partidas presupuestarias arbitrarias un papel central en la situación académica del país.
La problemática no es sólo salarial, sino también estructural: “las universidades en Argentina no tienen presupuesto desde que asumió Miley y están a merced de las partidas presupuestarias arbitrarias que manda el gobierno”, sostuvo Seleme.
El titular del gremio comparó la situación de la ruta 3 en Tierra del Fuego con el estado de las universidades nacionales, cuestionando la coherencia de un gobierno que, según su lectura, prioriza ciertos gastos mientras desatiende inversiones estratégicas para la educación superior y la infraestructura.
“La pregunta es quién va a financiar también las universidades en la Argentina -sostuvo el referente-. Así como tenemos la ruta 3 destruida y tenemos un gobierno nacional diciendo que no hay que hacer obra pública, entonces esperamos que mágicamente se vaya a arreglar la ruta; también tenemos un gobierno que dice que no hacen faltan universidades, que las destruye mirando el presupuesto, que las destruye destruyendo el salario de los docentes y no docentes de las universidades, y no lo hace por una cuestión económica, pasajera coyuntural, sino que lo hace por un convencimiento ideológico”.
“Ese es el gran problema que tenemos, o sea, no estamos frente a un gobierno que tiene algún tipo de inconveniente económico y entonces en función de mejorar la economía en algún momento planifica hacer obra pública, financiar la salud, financiar la educación, no; no estamos frente a ese gobierno”.
En cuanto a las condiciones laborales dentro de las instituciones, Seleme describió un panorama complejo y diverso: “El escalafón y la dedicación en la universidad es muy variado… pero por primera vez desde 2004 en la Argentina los docentes universitarios tienen a la mitad de su personal por debajo de la línea de la pobreza”.
Este dato, según analizó, refleja una pérdida de poder adquisitivo y una insatisfacción generalizada frente a un presupuesto que no acompaña la inflación ni las necesidades de las universidades.
Por último, reiteró el reclamo de los docentes de “un aumento salarial que equipare los salarios a la inflación que el propio gobierno declara que hubo”, y una ley de presupuesto que mantenga, al menos, los niveles de 2023 para el presupuesto universitario en todas las universidades argentinas.
Comentarios