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Desnutrición y violencia de género: Las problemáticas que trabaja CONIN

La institución ubicada en El Alambrador 146 trabaja principalmente con madres de 30 años. Sin embargo, la gran mayoría de las asistentes a CONIN son adolescentes de 14 a 17 años.

Tras 13 años de arduo trabajo, CONIN continúa más enfocado que nunca en brindar ayuda y asistencia a madres, y niños de la ciudad, así como también a los recién llegados a Río Grande.

La institución ubicada en El Alambrador 146 trabaja principalmente con madres de 30 años. Sin embargo, la gran mayoría de las asistentes a CONIN son adolescentes de 14 a 17 años. La gran mayoría de ellas se apersonan al lugar tras ser derivadas de los centros de salud, así como también por referentes barriales que detectaron una situación alarmante. El boca a boca también es un puntapié para que las madres asistan a CONIN.

Actualmente, entre las principales problemáticas que se registran en el lugar son la desnutrición, así como también la violencia de género, según resaltó la pediatra, directora médica de CONIN, Yanina Montenegro, en el estudio de ((La 97)) Radio Fueguina.

Bajo peso

En este sentido, la directora médica del CONIN indicó que esta principal problemática se da a raíz de los bajos ingresos monetarios que registran las familias. “Actualmente muchas de ellas no llegan a las 4 comidas al día”, detalló la especialista.

“Anteriormente les pedíamos que, aunque sea, incorporen carne 2 veces por semana en la comida”, pero los elevados precios de este producto imposibilitan que las familias puedan comprarla.

En este sentido, comentó que algunas madres asisten al lugar, y al tiempo avanzado del embarazo, detectan que ella no fue suplementada, ni se alimentó debidamente, provocando que “el niño ya tenga carencias de nutrientes desde la panza”, alertó. “En estos casos, nacen niños con anemia”.

La mala alimentación de la madre no se modifica una vez que el niño nació, y como consecuencia, muchas de ellas dan leche materna a sus hijos estando anémicas. “Muchas de ellas son adolescentes, entonces hay que hacer tratamientos para que el bebé no tome fórmula”, indicó la Dra. Montenegro.  

Además, algunos ingresos nuevos que se registraron en CONIN, son personas que arribaron a la Provincia hace muy poco tiempo “con la esperanza de encontrar trabajo, pero se encuentran desprotegidos por mucho tiempo, y se dan cuenta que no logran alimentar a sus hijos debidamente, así como también algunos de ellos viven hacinados: Son familias numerosas, que viven en una pieza”, resaltó.

Pese a las grandes problemáticas, desde CONIN se trabaja con suplementar a los niños. Este trabajo se articula en conjunto con el Centro Municipal de Salud N° 3, quienes les brindan ácido fólico, hierro. En caso de necesitar algún medicamento que no se encuentre en el Programa Remediar, los trabajadores de CONIN se encargan de comprarlos para las familias que lo necesiten.

Violencia de género

En estos casos, se logra identificar estos temas a raíz de una entrevista que se realiza con los médicos, así como también con la asistente social de CONIN. “Sin embargo, muchas situaciones salen a la luz cuando ya están en los talleres, y entre las madres comienzan a hablar de su situación”.

Gracias a un trabajo articulado con las distintas dependencias encargadas de este tema, se realiza la respectiva denuncia. “Nosotros insistimos en que se trabaje en el caso debidamente, porque si no se archivan y nadie los sigue. Tenemos asistente social para acompañar a las madres a denunciar. No se puede dejar pasar esto, porque es una bomba de tiempo en los hogares”, alertó.

Ante la consulta de ((La 97)) Radio Fueguina, sobre cómo se resguarda a la madre, la Dra. Montenegro indicó que “siempre damos avisos a las autoridades, y se saca al padre del hogar”.

El intenso trabajo de CONIN ayuda a que las familias vulnerables puedan mejorar su condición, para ser dados de alta del lugar. Sin embargo, lamentablemente, la crítica situación socioeconómica provoca que no haya diferencias entre los números ingresos y egresos del lugar.

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