Facundo Silva, de 39 años, junto a María de la Paz Lebate, de 36, y su hija Carmela de 3, fueron la familia docente seleccionada por el gobierno de Tierra del Fuego para desempeñarse en la escuela Nº38 «Presidente Raúl Alfonsín» de la base antártica Esperanza, durante el ciclo lectivo 2024.
María de la Paz Labate es licenciada en psicopedagogía y docente de nivel terciario, Facundo Silva, profesor de educación especial y de educación física, quien dialogó con ((La 97)) Radio Fueguina respecto a cómo se preparan para esta nueva experiencia:
“El proyecto surge en primera medida en una situación personal que a medida que la pareja se fue conformando lo fuimos hablando. En 2021 hicimos la primera inscripción y llegamos hasta la final, que fuimos suplentes de la pareja de Soledad y Núñez Barrios que fueron en el año 2022, así que ya contamos con esa primera experiencia y este año decidimos anotarnos otra vez ya con un recorrido y con una experiencia”, relató emocionado Facundo.
En este sentido, el docente oriundo de Ushuaia detalló el proceso de selección donde hay un primer llamado a los docentes, luego las familias inscritas tienen una evaluación de la Junta de Clasificación y Disciplinas donde se pasa a una instancia de formación con diferentes actores, entre ellos exdocentes antárticos, que permite una contextualización. Finalmente, luego se deben realizar los proyectos pedagógicos que se evalúan y la pareja seleccionada pasa a una instancia de estudios psicológicos y físicos.
“Sentimos mucha alegría y vemos que la responsabilidad es grande por lo que la tomamos como un desafío, -aseguró Facundo Silva-, así que nos estamos organizando con todo lo que tiene que ver con materiales e insumos para proyectar el año lectivo y los elementos necesarios para la familia”.
Facundo aseguró que tienen muchas expectativas, particularmente porque el próximo año se cumplen 120 años de permanencia ininterrumpida de Argentina en el continente, “así que es una oportunidad para poner en valor todo este tiempo de esfuerzo y sacrificio de un montón de hombres, mujeres, niños y niñas que habitan y sostienen la soberanía en el continente”, remarcó la importancia.
Junto a Facundo y su pareja, María Paz, también ira su hija de tres años Carmela, quien iniciará el ciclo lectivo con otros tres niños en el jardín de infantes de Santa Micaela.
En este sentido, el docente no dio importancia al marco de aislamiento, “en mi infancia viví en el Lago Escondido, que era una situación de aislamiento. La Pandemia fue una precursora para ir preparándonos y creemos que si bien es una situación de aislamiento vamos con un objetivo específico”.
“Somos parte responsable de sostener a las infancias y familias que alberga la Base Esperanza, me parece que en un circuito chico vamos a tener una importante dinámica social”, aseguró Facundo Silva.
Por último, respecto a las bajas temperaturas indicó que la idea es llevar equipamiento técnico de buena calidad, además de que en la Base existe un protocolo “para llevar las clases y considerar que cuando la inclemencia climática lo amerite, tener alternativas para brindar las clases”, concluyó Facundo Silva.
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