En la apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura fueguina, encabezada este miércoles por la mañana por el gobernador Gustavo Melella, una decisión política no pasó desapercibida para los presentes y quienes seguían el discurso del mandatario a través de las redes.
Y es que Melella llamó a declararle la guerra a los famosos «contratos basura» que son moneda corriente en las fábricas radicadas en la Provincia de Tierra del Fuego, hasta ahora con la anuencia de la Unión Obrera Metalúrgica (y también del Ministerio de Trabajo).
«Hay que terminar con los contratos que no dan seguridad, con contratos que no permiten proyectar», dijo el Gobernador, generando los aplausos de los presentes y agregando que esas contrataciones «tienen que dar seguridad a los trabajadores».
No es la primera vez que el Estado fueguino promete cargar contra esta modalidad irregular de contratación: en 2016 el entonces ministro de Trabajo del Gobierno de Bertone, Claudio Carrera, amenazaba con que “se labrarán multas y no se descarta llegar a la Justicia, donde hay juicios ganados”, ante esas vinculaciones por fuera de las normas.
«No vamos a considerar ningún otro acuerdo por afuera de lo que diga la normativa, incluido el acuerdo entre la UOM y AFARTE”, prometía Carrera entonces aunque, 7 años después, la situación de los metalúrgicos sigue siendo una especulación constante.
Se desconocen los pormenores de la acción mencionada hoy por Melella, aunque según explicó él mismo, ya ha dado órdenes a la ministra de Trabajo Karina Fernández para que comience a gestionar una política que de efectivo cumplimiento a la Ley de Contrato de Trabajo, buscando así frenar la contratación reiterada de personal que ha sido de uso corriente en las fábricas de Tierra del fuego durante los últimos años.
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