Blanca Ferrer, una vecina riograndense de 81 años, en representación de los abuelos del Hogar de Día “Lazos de Amor” hizo uso de la banca del vecino en el Concejo Deliberante local, en donde expuso la angustiante situación que afronta junto a los más de 120 abuelos que reclaman por recuperar el edificio que por años les dio cobijo, y del cual fueron primero trasladados y luego prácticamente despojados.
Blanca mencionó la invitación que recibió de parte del presidente del cuerpo, concejal Von der Thusen, a adherir a su proyecto de construcción de un nuevo hogar. Pero, en cambio pidió “soluciones urgentes, no podemos afrontar las esperas burocráticas”.
En tal sentido, afirmó que hace “dos largos años venimos bregando para recuperar el espacio que nos fue arrebatado en marzo del 2020” cuando se les pidió desalojar el edificio que les había sido entregado en Piedrabuena y Mosconi, para establecer allí un centro sanitario de emergencia por la situación de COVID.
Previamente, Blanca Ferrer esbozó una historia del Hogar hasta llegar al inconveniente que sufren hoy de ya no tener sede edilicia.
Relató que desde el año 1995 el Hogar de Día tenía su sede en el inmueble de calle padre Muñoz 921, del barrio AGP, por gestión de “una funcionaria de esa época que observó adultos en situación de calle o que pernoctaban en el hospital”.
Con el paso del tiempo, llegaron más adultos mayores al lugar, recordado por tener la única cancha de bochas de toda la provincia. Funcionaba de 9 a 16 de lunes a viernes “muy bien organizado, con personal permanente de limpieza y cocina, profesores de la Secretaría de Deportes y de Cultura, dibujo, pintura, folklore, ajedrez, teatro, transporte que pasaba a buscar a los adultos y luego de la merienda los llevaban a sus casas” recordó.
En diciembre de 2017 se les informó que YPF había donado un edificio en Piedrabuena y Mosconi para mudar allí el Hogar de Día, “para confort y bienestar de todos, durante la gobernación de Rosana Bertone con quien compartimos la inauguración y descubrimiento de placas” agregó luego. La mudanza fue en enero de 2018 “al nuevo hogar más grande y más cómodo con las mismas atenciones y servicios. Entretenidos y felices éramos cada vez más los concurrentes”.
En marzo de 2020, con la llegada de la pandemia, el gobierno decidió suspender las actividades y las instalaciones fueron cedidas a salud ante la eventual necesidad de ampliar los lugares de internación. “Nos informaron que sería solamente durante el periodo de contagio y que luego todo volvería a la normalidad. Coincidimos en ese momento que la medida era necesaria”.
Angustiosamente Blanca expuso que “todos volvieron a la normalidad menos nosotros” y desgranó el calvario que vienen padeciendo desde ese entonces para que “se nos devuelva nuestro antiguo edificio de padre Muñoz, ya que nos dicen que el edificio de Mosconi estuvo originalmente destinado a Salud” lo que efectivamente ocurrió y ahora se instaló un cartel que dice RAM, residencia de adultos mayores.
El edificio de AGP desde la pandemia está siendo utilizado como depósito de mercadería y se encuentra en deplorable estado de mantenimiento.
“Enviamos una nota al gobernador el 27 de enero del 2021, jamás nos respondió” continuó Ferrer. “La directora de adultos mayores de la provincia, el subsecretario, nadie sabía lo que pasaba, no tenían ninguna información. Juntamos 3000 firmas para enviarlas con una nota al gobernador el 17 de noviembre del año pasado. Tampoco tuvimos respuesta” volvió a quejarse.
Mientras seguían sin obtener solución, se les ofreció diversos talleres “dispersos por toda la ciudad, la mayoría de los días no había transporte, nadie daba información concreta, nos sentimos abandonados e ignorados”.
Concurrieron a los medios a contar su padecer e incluso hicieron un abrazo al hogar, ahora RAM, con gran acompañamiento de la comunidad. “Nadie desde el Ejecutivo ni del Ministerio de Desarrollo de que dependemos se acercó o nos dio alguna muestra de interés”.
El 23 de enero de 2022 le expusieron por nota la situación al nuevo ministro Marcelo Maciel, “sin ninguna respuesta”. Cuando hicieron pública su decisión de cortar el puente para que su reclamo se atienda, los convocó el Subsecretario para una entrevista con Maciel el domingo 27 de marzo.
Allí el funcionario les ofreció como solución a los seis representantes, para sus encuentros el salón comedor del edificio de Piedrabuena y Mosconi. Mientras, máximo cinco meses, conseguirían un depósito para vaciar el edificio de AGP, arreglar el comedor, la cocina y el living, “para que definitivamente recuperamos nuestro lugar y que de a poco irían reparando el resto del edificio”.
El 13 de abril, más de 100 adultos en asamblea aceptaron la propuesta, con la expresa promesa de estar muy atentos al cumplimiento estricto sobre todo en cuanto al tiempo de entrega.
“Otra vez se burlaron de nosotros” resumió finalmente blanca Ferrer, y cuestionó que “con la difusión de nuestra participación aquí, comunicaron mediáticamente que empezaban a ocuparse” en referencia al gobierno provincial.
En definitiva, insistió en peticionar por “una justa e inmediata solución. No queremos hacer lo que nos hicieron, no queremos desalojar a nadie, solo pedimos que piensen en los 120 abuelos que a nuestra edad debemos correr por la ciudad en busca de actividades recreativas o placenteras en distintos horarios y espacios físicos divergentes, dependiendo de medios económicos a veces inexistentes”.
Blanca Ferrer concluyó su alocución pronunciando un “imperioso llamado al gobernador para que se dé prioridad a nuestro reclamo, que no nos ignore, caminamos lento porque somos viejos, pero estamos vivos”.
Comentarios