Publicado en
Chicos Que Crecen

Marina Lucero, una Periodista Deportiva sin ejercer pero con experiencia de vida

El segmento de biografías locales del programa radial «Un Gran Día» presenta en esta ocasión la historia de una trabajadora municipal que se recibió de Periodista Deportiva.

Marina Lucero se recibió de Periodista Deportiva pero actualmente se desempeña en el área de Recursos Humanos del Municipio de Río Grande. La secundaria la terminó en el Colegio María Auxiliadora en 1992 y tomó la decisión de irse a estudiar a Córdoba.

“En esa época era una carrera que recién estaba tomando mucho auge y era como medio revolucionario que una mujer se pusiese a estudiar Periodismo Deportivo, era más bien una elección de los hombres, pero siempre me había gustado todo lo vinculado al deporte”, señaló la profesional, y agregó que “siempre tuve esa condición como de rebeldía en mi personalidad, por eso yo me fui a estudiar en primera instancia a Córdoba e hice ahí el primer año de la carrera en la Facultad Nacional de Córdoba en las Ciencias de la Comunicación y, después, como quería algo más práctico, que me llevara por un camino que tuviera más contacto con los medios, terminé estudiando en el Mariano Moreno”.

Sin embargo, su recorrido no terminó ahí, porque luego decidió trasladarse a Buenos Aires, donde finalmente consiguió el título. “Terminé egresando después en Buenos Aires, en el Círculo de Periodistas Deportivos porque me puse de novia muy jovencita en ese momento, así que el novio se encontraba viviendo en Buenos Aires”, comentó Lucero.

Respecto del contexto de aquel entonces para los estudiantes, la vecina destacó que “para todos los jóvenes adolescentes en ese momento había muy pocas ofertas de estudios acá en Tierra del Fuego, entonces los que terminábamos el colegio partíamos llenos de miedo a la ciudad grande, a aprender a vivir, no solamente a un nivel superior de estudio, sino también a aprender a vivir solo, así que tratábamos de encontrarnos entre los chicos que nos encontrábamos fuera de la isla y se terminaba haciendo como un apoyo entre todos”.

Además, el aspecto de las comunicaciones era completamente diferente al presente: “No había una tecnología como cuentan hoy los chicos, que pueden comunicarse con los padres a través de las videollamadas o de internet. En aquella época te sobraban 2 pesos y llamabas de un teléfono público en alguna plaza para hablar con tu familia. Me acuerdo el tema de los teléfonos pinchados, hacíamos colas y colas porque por ahí se descubría un teléfono pinchado y estabas haciendo el jueguito en el teléfono para poder hablar un poco más con la familia”.

“Yo termino de recibir mi título siendo madre -relató la periodista deportivo-. El último año las cosas de la vida me dieron un hijo, así que fui a buscar mi título con mi primer hijo y cuando vine a Tierra el Fuego como que necesité tener un ingreso que me permitiera desarrollarme de manera más segura, en ese momento del periodismo también era medio difícil de que te diera lugar a que tener un salario que te permitiera sostener una familia, entonces me fue llevando la vida por otro camino y quedó como la profesión sin ejercer, pero es un enriquecimiento que te da poder haberte formado, el poder haber salido de acá y conocer otras cosas”.

Lucero trabaja en el área de Formación Laboral de la Dirección de Empleo del Municipio hace 18 años y está “contenta con el trabajo, siempre viendo qué cosas nuevas se pueden hacer y de qué manera uno puede estar al servicio de las personas que por ahí tienen necesidades, gente de acá y que por ahí tiene necesidades”.

Comentarios