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Mala praxis

A dos días de la prescripción, nadie busca a los dos médicos prófugos

Nada se sabe del paradero Raúl Rausch y Juan Montenegro, quienes permanecen ocultos para evitar ser juzgados por presunta mala praxis. Quejas de la familia por la falta total de medidas tendientes a ubicarlos.

 El próximo sábado prescribe de manera inexorable la causa penal en la que figuran como procesados y no habrá forma de juzgar a los médicos Raúl Gerónimo Rausch y Juan Carlos Montenegro Martínez.

Ambos profesionales residentes en Río Grande se encuentran con paradero desconocido, fieles a la estrategia de sus abogados, consistente en permanecer en esa situación para burlar a la Justicia, evitando que se lleve a cabo el juicio en que se debería resolver si son culpables o inocentes.

Rausch (un profesional de larga carrera profesional en la ciudad) y Montenegro están acusados por «lesiones gravísimas culposas», señalados como los autores materiales de los daños que sufrió una trabajadora judicial en el año 2012, quien padeció un ACV y actualmente continúa convaleciente.

Los dos debían presentarse el lunes 14 de febrero en Tribunales para un juicio contrarreloj: es que la causa (que ya tuvo incluso un sobreseimiento) está a punto de prescribir y esto hizo que incluso tenga «prioridad», llegando a posponer otros procesos que tenían que iniciarse esa misma semana.

Pese a la citación, ni los dos imputados ni sus abogados defensores se hicieron presentes en la sala de juicio, por lo que fueron declarados en rebeldía y se solicitó su captura nacional e internacional.

Tras el procedimiento, se informó que no se obtuvieron pistas respecto del paradero de los prófugos, por lo que se dispuso el secuestro de agendas, teléfonos celulares, computadoras y otros elementos considerados de interés, para la nueva causa que se ha instado contra ellos por “obstrucción a la Justicia” y “rebeldía”.

Luego de que los allanamientos dieron resultados negativos en relación a sus paraderos, nada más se accionó al respcto y la familia de la víctima denuncia que no se ha puesto en marcha protocolo alguno para intentar rastrearlos, muy a pesar de la declaración de “prófugos” que recae sobre ellos, con una recompensa ofrecida por la familia, consistente en 500 mil pesos por cada uno..

“No hubo controles en las rutas, no existe información de compañías de viajes aéreos y terrestres, tampoco de las telefónicas y no se ha ordenado operativo alguno para buscarlos”, se indignó una fuente cercana al entorno de la víctima, en diálogo con radiofueguina.com.

 Al respecto, indicó que desde la Justicia no se ha pedido a las compañías telefónicas el rastreo de los teléfonos celulares de Rausch y Montenegro y que tampoco Aerolíneas Argentinas ha respondido al pedido de la familia en relación a si han podido salir de la Isla por vía aérea, sin que los funcionarios judiciales hayan exigido una respuesta en tal sentido.

“La situación es más grave porque tenemos indicios firmes de que uno de ellos salió por el aeropuerto hace unas semanas, pero Aerolíneas se ha negado a confirmarnos el dato”, se indignó el vocero de la familia.

Paralelamente -según pudo confirmar este medio en las distintas fuerzas de seguridad- no existen órdenes emanadas de juzgado alguno para el control o requisa de vehículos en rutas o calles, medida que habitual en casos de solicitud de paradero de personas.

Embargados por la impotencia, los familiares de la víctima repudian la actitud de los abogados de los prófugos, quienes –aseguran- se burlan de la situación, desprovistos de toda empatía por la situación de quien espera postrada una reparación al daño que sufrió.

“Postean en las redes publicaciones de todo tipo, gozando porque la Justicia no los va a alcanzar, gracias a que huyeron cobardemente, apañados por una justicia impotente e indolente”, deploró uno de los más cercanos integrantes del entorno de la víctima.

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