Savore comentó que “en principio estamos contentos de haber sido convocados”, y agregó que “la Federación FABA representa a 26.000 comercios en la provincia de Buenos Aires y la Confederación General Almacenera representa un poquito más de 60.000 y la verdad que nuestro sector nunca fue convocado, así que en principio felices de poder ser parte de un debate sano para construir, o reconstruir o pensar un nuevo formato comercial”.
“El tema del congelamiento nosotros lo tomamos con entusiasmo. Sabemos que nosotros somos el anteúltimo eslabón de la cadena. Nosotros el 80% de la mercadería se la compramos a los mayoristas y distribuidores. Exceptuando dos lácteas, dos empresas de gaseosas y una de cerveza, todo lo demás lo compramos en el mayorista, o sea que nosotros, igual que el vecino y el cliente, nos encontramos una góndola que dice el precio que tenemos que pagar, entonces de verá ahora que puede existir una posibilidad que, obviamente, esto va a depender de los monopolios que acepten y que la Secretaría de Comercio también se ponga firme en respetar este amesetamiento de precios”.
“A veces nos pasa con el vecino, el cliente, cuando viene a nuestro negocio, que nuestra atención es personalizada, entonces ocurre que uno ve el malestar del cliente, la bronca, la impotencia, la tristeza de no llegar con el dinero que vino a comprar todos los productos, entonces tal vez tengamos en este tiempo la oportunidad de darle a la gente la tranquilidad de volver al negocio al otro día, o a los dos días, y seguir encontrando el mismo precio, y para nosotros es importantísimo”, remarcó Fernando Savore.
“Se pidió a las empresas de los hipermercados y a los mayoristas que se entregarán las listas retroactivas al primero de octubre, nosotros no tenemos ese tipo de lista, pero si lo que asumimos es el compromiso de que si nosotros detectamos que hay aumentos en distintas cadenas de precios lo que le pedimos a la Secretaría es que nos den un correo electrónico o un WhatsApp, una línea, como para nosotros poder elevar estos aumentos”, relató el referente, y añadió que “no digo que con esto vamos a ejercer el poder de Policía, simplemente lo que hacemos es que, si alguien aumenta, que no seamos nosotros de vuelta los que tengamos que poner la cara frente al cliente y tener que dar explicaciones, que ni siquiera tenemos el motivo para darlas porque nosotros compramos y vendemos”.
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