Sin lugar a dudas que los ahorristas todos los meses estudian cuáles son las mejores alternativas que pueden tener a la hora de capitalizarse con ganancias por un lado, pero por otro, para no perder el poder adquisitivo. De esta forma, comienzan los debates y análisis sobre si conviene más el plazo fijo tradicional o el plazo fijo UVA. Si bien no son las únicas alternativas de inversión que se pueden tener en el los bancos, sí se puede decir que son las más conocidas en la actualidad.
Por una parte está el plazo fijo UVA, el cual se actualiza por CER, que es el Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER), que sigue el índice de precios. Es la forma más práctica de cubrir los ahorros contra la inflación, más aún cuando se puede ver que en los últimos meses dio un rendimiento mensual aproximado del 4%. No obstante esto, los expertos en finanzas e inversiones vaticinan que en los próximos meses va a tener una tendencia a la baja, por lo que podría dejar de ser una de las alternativas más óptimas a la hora de tener rendimientos.
Por otro lado está la posibilidad de colocar ahorros en un plazo fijo que sea tradicional, es decir, que fija una tasa anual de interés. En la actualidad, de acuerdo a disposiciones de la autoridad monetaria en el país, que es el Banco Central, ofrece una tasa de interés que es de 37% para montos de hasta $1.000.000 y de 34% para montos que sean menores a esa suma antes mencionada. Se puede decir que en promedio de forma mensual se brinda una tasa de 3,08%, lo que hace que a priori este plazo fijo sea menos conveniente que el ajustable por UVAs.
Los analistas indican que quienes apuestan por el plazo fijo UVA, deben estar atentos a dos cosas. Por un lado es a los porcentajes de inflación, debido a que en el mes de junio esta fue de apenas un punto por debajo del 3%, y para el período de meses que va de julio hasta septiembre, estima que el promedio va a ser de 2,6%, por lo que quedaría inferior la rentabilidad a lo que ofrecen los plazos fijos tradicionales. Por otro lado, a lo que deben estar atentos es a la cuestión del plazo, debido a que en los tradicionales se puede comenzar invirtiendo a tan solo 30 días y en los que son actualizables por UVAs, el plazo mínimo es de 90 días (hay opciones con pre cancelación anticipada pero en ese caso se aplica una tasa diferencial que no es conveniente).
Si bien los plazos fijos en UVAs son una buena opción para seguir la inflación y no perder poder adquisitivo, también se debe estar sumamente atentos a lo que vaya a suceder con el dólar, ya que en los últimos días subió su cotización paralela. En resumidas cuentas, debemos decir que la elección del plazo fijo para invertir va a depender sobre todo de la suba o baja de la inflación de los próximos meses.
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