Con sólo 27 años, el joven tiene ya un frondoso prontuario judicial y es un sujeto conocido para la policía.
Es por ello que no fue difícil reconocerlo cuando fue captado por las cámaras de seguridad de un local al que ingresó para repetir el recurso que venía aplicando toda la semana: ofrecerse para limpiar veredas y ante la mínima distracción alzarse con elementos ajenos de valor.
La zona preferida por Facundo García era el casco viejo de la ciudad. Así, en la mañana del sábado, robó la billetera del empleado de una emisora radial a la que ingresó con el pretexto de ofrecerse para trabajar.
Mientras la policía ya lo buscaba, llegó a una vivienda de la calle 9 de Julio al 1.000 ofreciéndose para limpiar la vereda; a la propietaria del lugar (esposa de un policía) le resultó sospechoso porque, entre otros detalles, no traía con él ningún elemento con que realizar la tarea. Enseguida llegó el esposo de la mujer quien, alertado por la situación, salió a recorrer la zona y fue entonces que observó al sospechoso escapar tras haber violentado una camioneta Toyota Hilux estacionada en la calle.
Tras una corta persecución, García terminó una vez más detenido, en esta oportunidad por tentativa de hurto y violación de domicilio.
Para su fortuna, la Fiscalía ordenó dejarlo inmediatamente en libertad, por lo que no demoró nada en continuar su raid delictivo. Así fue que esta madrugada a las 6 horas, el llamado de un hombre de 68 años que lo vio ingresar en su patio movilizó una vez más a los efectivos de la comisaría Primera.
Aprehendido una vez más en flagrancia, García fue otra vez puesto a disposición del Fiscal de Turno quien, ahora sí, dispuso que quede alojado en un calabozo, en carácter de comunicado, hasta mañana lunes cuando será entrevistado por las autoridades judiciales.
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