Esta mañana, a partir de las 9,30 horas, se reiniciará en la Sala de Juicio de Río Grande el debate oral por el asesinato de Juan Carlos Lucena, acaecido el 20 de enero pasado en nuestra ciudad.
Tras la primera jornada del plenario –cumplida ayer- la representante de la parte acusatoria, la Fiscal Verónica Marchisio analizó lo actuado y adelantó cuál será el elemento central sobre el cual girará el proceso.
En diálogo exclusivo con el programa “Lo más sano posible” por ((La 97)) Radio Fueguina, la Dra Marchisio remarcó que “Tenemos desde la investigación una batería de pruebas que llevaron a la defensa a reconocer ya la autoría (de los dos imputados) en el hecho y en la circunstancia de haber dado muerte y ocasionado el robo en la persona de Lucena”.
“Lo que la defensa llevó como estrategia del Ministerio es la inimputabilidad –resaltó la Fiscal- es decir la responsabilidad en el hecho, la culpabilidad y la consecuente pena que se pueda imponer de acuerdo a la capacidad que tenían para comprender lo delictuoso del accionar”.
Al estar por primera vez frente al Jurado, ambos acusados Facundo Oscar Mansilla y Eduardo Javier Acosta declararon que, previo a la comisión del crimen, habían consumido una alta dosis de drogas y alcohol, lo que les provocó una pérdida temporal de sus facultades mentales y que no recordaban en absoluto lo que habían hecho aquella aciaga tarde-noche del 20 de enero.
Sin haber presentado objeción contra la acusación, se avizora que toda la estrategia defensiva, llevada adelante por Gustavo Ariznabarreta, apuntará a lograr una declaración de inimputabilidad de los dos reos.
“Esto se va a basar fundamentalmente en las pericias psiquiátricas”, sentenció Marchisio, quien refirió que “ya se les han hecho dos pericias a cada uno de ellos”.
“Va a ser crucial nuevamente la palabra del psiquiatra que va a exponer en el curso del debate”, anticipó la Fiscal.
Dudoso arrepentimiento
En su declaración ante el tribunal, ambos acusados vertieron expresiones de “arrepentimiento” y “vergüenza” por lo sucedido. Respecto de ello, la representante del Ministerio Público Fiscal advirtió que “El arrepentimiento de ninguna manera puede utilizarse como atenuante”.
Descreyó, de todos modos, de que dichas manifestaciones respondieran a un sentimiento sincero. “Noté mucha frialdad en las declaraciones de ambos”, observó la Fiscal.
“Tampoco hubo unas palabras de arrepentimiento hacia la familia”, deploró Marchisio.
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