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Infierno en Isla Grande: Comenzó la investigación judicial por el dantesco incendio de la fábrica

Ayer el Juez Cesari recorrió todo el sector afectado por el siniestro, incluidas las casas de los vecinos. Hoy se efectuaría la pericia de Bomberos y Policía Científica. Descartaron actividad radiactiva en el sector.

Mientras se apagan las últimas llamas de lo que fue uno de los incendios más pavorosos en la historia del parque industrial de Río Grande, los vecinos evacuados comienzan a retornar a sus hogares, al tiempo que se inicia una compleja investigación judicial para determinar causas, culpas y responsabilidades que dieron origen al siniestro.

Al anochecer de este jueves el Juez de Instrucción Daniel Cesari Hernández efectuó una extensa recorrida por todo el sector afectado, supervisó el operativo de retorno a sus hogares de los vecinos evacuados y dio las primeras indicaciones para que se lleven adelante –probablemente hoy- las tareas periciales a cargo de Bomberos y Policía Científica.

En su recorrida (que insumió más de dos horas), el magistrado verificó que los restos del siniestro hayan perdido temperatura para permitir sin riesgo las pericias y se ocupó de determinar el punto exacto donde comenzó el fuego, apelando para ello a imágenes de fotos y videos (uno de ellos el publicado por radiofueguina.com por aporte de un oyente de la radio).

En compañía del secretario de Seguridad Javier Eposto, jefes policiales de la comisaría Segunda y técnicos en siniestros, el doctor Cesari recorrió íntegramente el predio de lo que fue la planta industrial y sus alrededores y observó los puntos desde los cuales se podrían haber captado imágenes a través de cámaras de seguridad del vecindario.

Esta mañana, el Juez se reunió en su despacho con todos los técnicos mencionados y expertos de  Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN), quienes descartaron rotundamente que se hubiera registrado radiactividad en la zona, como mencionaron insistentemente algunos medios.

La actividad judicial, en consecuencia, se extenderá en dos direcciones: determinar con un mínimo de certeza los detalles de lo acontecido y perseguir a los presuntos autores si –como se cree- el siniestro fue causado intencionalmente.

 

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