La Justicia decidió hoy la intervención del histórico Partido Justicialista (PJ), fundado hace más de 70 años por el tres veces ex presidente Juan Domingo Perón, al considerar que transita un estado de «vaciamiento partidario», informaron hoy fuentes judiciales.
La jueza federal con funciones electorales María Servini de Cubría resolvió intervenir el peronismo, hasta el momento presidido por el diputado nacional José Luis Gioja, y dejarlo en manos de Luis Barrionuevo, dirigente de gastronómicos y célebre sindicalista..
«Esta suerte de vaciamiento partidario, provocado por quienes dicen ser peronistas al solo efecto de obtener una ventaja electoral, se ve perfectamente plasmado en la actitud de aquellos que utilizando el ‘sello’ de la agrupación y el apellido de quien fuera su fundador, emigran a otras agrupaciones políticas para apoyar candidaturas que no son sostenidas por el Partido Justicialista», analizó Servini de Cubría en su dictamen, publicado en el Centro de Información Judicial (CIJ).
De ese modo, la jueza hizo referencia a que en las últimas elecciones nacionales de medio término el PJ fue dividido detrás de las candidaturas legislativas de varios postulantes, uno de ellos la ex presidenta y actual senadora Cristina Fernández de Kirchner, que rompió con el partido y fundó su agrupación opositora Unidad Ciudadana, con la que logró un asiento en el Parlamento.
Gioja resiste
La decisión de la jueza fue cuestionada por Gioja, quien anunció que apelará la medida tras considerarla una «intromisión» en la política interna, publicó la agencia de noticias Télam.
En su fallo, Servini de Cubría advirtió que la última reunión que realizó el Congreso Nacional del peronismo, el órgano que agrupa a todos los distritos del país, fue en febrero de 2016, lo que demuestra una «situación de crisis partidaria»
«Esta inacción resulta inexplicable frente a la cantidad de cuestiones que deben tratarse y resolverse para lograr posicionar al partido de la mejor manera posible frente a los próximos comicios del año 2019», cuando se elegirá un nuevo presidente, evaluó la jueza.
Barrionuevo es el histórico jefe del sindicato que representa a los trabajadores del turismo, hoteleros y gastronómicos.
Su figura pasó a ser reconocida en 1990 cuando en un programa televisivo propuso a los dirigentes políticos argentinos «dejar de robar durante dos años» para promover el crecimiento del país.
Barrionuevo fue diputado y senador nacional por el peronismo de la provincia de Catamarca, situada en el noroeste argentino. Actualmente lidera la disidente agrupación Azul y Blanca de la Confederación General del Trabajo (CGT), la principal central obrera de Argentina.
La esposa de Barrionuevo es la diputada nacional Graciela Camaño, que integra el partido Frente Renovador, surgido del peronismo y liderado por Sergio Massa, que fue jefe de Gabinete durante la presidencia de Fernández de Kirchner y postulante a presidenta en las elecciones nacionales de 2015, en las que culminó tercero.
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