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Franco Lazarte quedó en libertad y así continuará su proceso

Se trata del padre de los dos hermanitos que fallecieron en un trágico incendio, en el mes de mayo. El juez Césari Hernández había negado su excarcelación, pero la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones decidió liberarlo. Cómo sigue la causa.

Luego de innumerables idas y vueltas, Franco Lazarte, el padre de los dos niños fallecidos en un trágico incendio en mayo pasado, quedó en libertad y así continuará su proceso.

Así lo decidió la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones, luego de la presentación realizada por la defensa de Lazarte, ejercida por el Dr. Pedro Fernández y el Dr. Francisco Giménez , que ya había intentado promover su excarcelación mediante un pedido al Juzgado de Instrucción que encabeza el Dr. Césari Hernández.

El magistrado había argumentado su resistencia a liberar a Lazarte sosteniendo que existía riesgo de fuga, cuestión que nunca se pudo probar.

El trágico incendio

El pasado 13 de mayo por la tarde, la comunidad toda de Río Grande lloraba la muerte de dos pequeños hermanitos, ocurrida en la Margen Sur y a raíz de un trágico incendio.

Si el caso no llegaba a conmover a todos, en la madrugada del 14 de mayo la causa daría un vuelco que tornaría la historia aún más escalofriante: la forense del Poder Judicial aseguraba que la niña, de apenas 3 años, había sido abusada.

Todas las miradas apuntaron directamente, como suele ocurrir, al círculo familiar. Entre los sospechosos, la Justicia se decidió por el padre, Joan Franco Lazarte, quien hasta el día de hoy permaneció privado de su libertad acusado de «abuso» y «homicidio culposo».

La investigación

Luego de la pericia realizada por la Dra. Inés Aparici, que aseguraba que uno de los niños había sido abusado, se realizaron pruebas y contrapruebas que no terminaron por comprobar la presencia de rastros de ADN dentro de la pequeña.

Tampoco prosperó la hipótesis de que se había tratado de un incendio intencional provocado por el propio Lazarte para ocultar los rastros del abuso que no existió o al menos no se encontraron pruebas de ello.

Por eso, el joven padre continuará el proceso en libertad junto al reto de su familia, aguardando la citación a juicio para cerrar una tragedia que Río Grande aún llora.

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