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Ibarra sostiene que existen pruebas para condenar al presunto sacerdote abusador

El abogado defensor del presbítero apeló el procesamiento, afirmando que no existen evidencias de los abusos. Cristian Vázquez está acusado de «abuso sexual gravemente ultrajante y con acceso carnal».

Luego de que la Justicia dictara el procesamiento del sacerdote Cristian Vázquez por el presunto abuso de una menor de edad, el abogado representante del presbítero decidió apelar la medida, indicando que no existen pruebas suficientes para probar el delito.

Sin embargo, la defensa de la víctima sostiene que éstas sí existen y mantiene confiada en que logrará avanzar con una condena contra Vázquez.

Así lo dejó en claro en ((La 97)) Radio Fueguina el Dr. Francisco Ibarra, que representa a la joven víctima.

Los abusos sexuales

El letrado explicó que en este tipo de delitos, al menos en un 99% de los casos, los abusos ocurren «en el ámbito privado y en un grado de intimidad que torna imposible que existan testigos oculares».

Por ello, señaló, es inviable la presentación del Dr. Da Fonseca, que representa a Vázquez y que fundamenta la apelación en la falta de testigos.

El hecho

Cristian Vázquez está acusado de abusar sexualmente de una menor de edad al menos en tres oportunidades: dos de ellas de manera “simple” y una de ellas con acceso carnal.

El ataque en cuestión habría ocurrido cuando la víctima era sólo una niña, sin poder precisar si en el momento tenía 12 o 13 años.

El abogado defensor de la víctima, Francisco Ibarra, dialogó con ((La 97)) Radio Fueguina y celebró que el caso avance a paso firme en los Tribunales de Tierra del Fuego.

Cabe recordar que, en el momento de la indagatoria, Ibarra había adelantado que las pruebas contra el presbítero eran “contundentes” y el propio titular del Ministerio Público Fiscal se había expresado en el mismo sentido.

El sacerdote, separado por la Curia

El cura  Cristian Vázquez fue apartado de su cargo por el obispo de Tierra del Fuego y Santa Cruz, Miguel Ángel D´Annibale y el propio Vaticano ordenó celebrar un Proceso Administrativo Penal, conforme al canon 1720 del Código de Derecho Canónico de la Iglesia Católica, contra el presbítero.

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