El ministro del Interior tuvo que aclarar durante su permanencia en Tierra del Fuego que el gobierno nacional «no va a abrir la importación en forma indiscriminada».
En su visita a la provincia para asistir a la asunción de la nueva Gobernadora, Rogelio Frigerio fue consultado por los puestos de trabajo generados en las fábricas electrónicas radicadas en la Isla y aseguró que se usarán «todas las herramientas del Estado para cuidar cada uno de los trabajos en Argentina». Luego, agregó que los fueguinos tienen un nivel «desmedido de planta en el sector público».
«Queremos ocuparnos y darle una mano en todo lo que se pueda a la nueva gobernadora, convencidos del enorme potencial que tiene Tierra del Fuego, que hasta ahora ha sido desaprovechado», lanzó Frigerio al llegar al juramento de la mandataria entrante.
Sin embargo, marcó lo que es una falencia provincial de acuerdo a su criterio: «Hay un número desmedido de la planta del sector público». El ministro dijo que para paliar esa situación se deben crear nuevos empleos «para lentamente trasladar del sector público al sector privado, porque el Estado no está en condiciones de conservar tanta mano de obra».
«El trabajo en Tierra del Fuego tiene doble valor; el primero es el que tiene en cualquier lugar de la Argentina y el segundo, es el mantenimiento de la población en un lugar estratégico del país. Eso nos obliga a redoblar los esfuerzos», analizó.
Frigerio arribó a la provincia junto al ministro de Educación, Esteban Bullrich, para participar del acto de asunción Bertone, con quien aseguró que se mantendrá una buena relación. «Tenemos que acostumbrarnos a formatear la cabeza distinta, cambiar en la argentina los vínculos entre el Gobierno Nacional y las Provincias, sobre lo cual no vamos a hacer distinción», señaló.
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