Publicado en

Masivas marchas de protesta contra Dilma Rousseff en Brasil

Las manifestaciones tienen lugar en un centenar de ciudades y reclaman que la mandataria presente su renuncia tras las denuncias de corrupción.

Grupos de manifestantes salieron este domingo a las calles de ciudades y pueblos de Brasil para participar en un día de protestas antigubernamentales a nivel nacional, considerado un termómetro del descontento popular con la presidenta Dilma Rousseff.

Las protestas, convocadas principalmente en las redes sociales por una serie de organizaciones, fustigan a Rousseff, cuyo segundo período en el gobierno se ha visto conmovido por un creciente escándalo de corrupción que ha involucrado a políticos de su Partido de los Trabajadores, así como por una economía vacilante, la depreciación de la moneda y el aumento de la inflación.

Es la tercera manifestación antigubernamental a gran escala este año, después de otras en marzo y abril.

Los analistas políticos creen que la concurrencia a las manifestaciones del domingo podrían determinar el futuro del movimiento de protestas. Si la convocatoria moviliza a multitudes podría aumentar las presiones sobre el gobierno, pero si la concurrencia es escasa podría dar cierto alivio a la presidenta.

No obstante apenas comenzaba a prepararse la protesta en Sao Paulo, donde tales movilizaciones tienden a atraer grandes multitudes, pareció inicialmente que muchas de las marchas previas tuvieron una afluencia relativamente modesta.

Miles de personas que portaban banderas nacionales se manifestaron en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, aunque la afluencia fue menor que en la movilización de marzo.

Otras ciudades

Otras manifestaciones, principalmente pequeñas, tuvieron lugar en diversas ciudades, como la metrópolis de Belem, en Recife, en la Amazonia, en el noreste, y en Belo Horizonte, en el centro del país.

En la capital, Brasilia, una marcha por una avenida central donde se levantan ministerios y monumentos parecía haber reunido a varios miles de participantes. Se anticipaban más de 200 manifestaciones en todo el país.

Las manifestaciones fueron convocadas principalmente por grupos de activistas en la red que demandan desde el juicio político a la presidenta hasta el retorno a una dictadura militar como la que rigió de 1964 a 1985, pero el fin de la corrupción parecía la exigencia principal mientras se amplía la pesquisa contra la corrupción en la compañía petrolera estatal Petrobras.

La operación «Lavado de coches» que comenzó hace más de un año como una investigación a un plan en el que se daban sobornos a cambio de contratos en Petrobras, ha expuesto la amplitud de la corrupción que permea en la sociedad brasileña debido a la implicación de miembros del Partido de los Trabajadores y de otras fuerzas políticas, así como de ejecutivos de poderosas compañías constructoras.

Lincoln Carlos, un empresario de 60 años, dijo que se unía a la protesta de Río para reclamar el fin de la corrupción. «Han robado al país», afirmó. «Es vergonzoso».

La protesta de Río, en una avenida amplia que corre a lo largo de la playa de Copacabana, debía coincidir con una prueba de ciclismo previa a los Juegos Olímpicos de 2016, pero los organizadores cambiaron la ruta y el horario para evitar posibles enfrentamientos.

En medio de una pesquisa por corrupción y la caída de la otrora boyante economía que ahora está al borde de la recesión, la popularidad de Rouseff ha caído a su menor nivel para un mandatario brasileño desde 1992, cuando el presidente Fernando Collor de Mello se vio obligado a dejar el cargo después de ser sometido a un juicio político por corrupción. Una encuesta tomada este mes indicó que apenas el 8% de los encuestados consideraba que el gobierno era «excelente» o «bueno». Por el contrario, el 71% consideró que el gobierno era «un fracaso». La encuesta de Datafolha se basó en entrevistas a 3.358 personas el 4 y 5 de agosto y tuvo un margen del 2%.

Las manifestaciones tienen lugar en un centenar de ciudades y reclaman que la mandataria presente su renuncia tras las denuncias de corrupción. Galería de Fotos.

El Grupo Eurasia, organización asesora sobre riesgos políticos, consideró las protestas del domingo como un indicio importante a tener en cuenta. «Mientras los llamamientos a la renuncia de Rouseff serán el lema central de las manifestaciones del domingo, el mayor riesgo para el gobierno sería que las protestas masivas se hicieran frecuentes y fuesen seguidas por movimientos sindicales», afirmó.

Brasil_protestas

Antecedente

En 2013, una ola de protestas a nivel nacional tomó por sorpresa a los analistas ya que las multitudes más numerosas en una generación salieron a las calles antes del torneo de fútbol Copa Confederaciones, un año antes de la Copa Mundial de 2014.

Los manifestantes estaban indignados por los gastos generosos en estadios y otra infraestructura para el mundial, en contraste con el deterioro de escuelas y hospitales. La insatisfacción con los servicios públicos y los impuestos elevados sigue en ebullición mientras el país se prepara para los Juegos Olímpicos de Río en 2016.

Comentarios