El pasado martes 21 de septiembre de 2010, se realizó una persecución policial por las calles de Río Grande. Allí, dos uniformados, entre los que se encontraba Balaguer, reconocieron al delincuente Víctor “Chucky” Andrade, sobre quien caía una orden de requisa personal.
Luego de que Andrade se diera a la fuga, desoyendo la orden de detención, Balaguer utilizó una escopeta con postas de goma para detenerlo. Por las heridas, que afectaron la arteria femoral del delincuente, Andrade falleció dos días después en el Hospital Regional Río Grande.
Por este hecho, Balaguer se encuentra acusado bajo la figura de “homicidio agravado”, carátula que comenzó a debatirse hoy a través de la citación de 23 testigos.
Para contrarrestar lo dicho por la parte acusatoria, el abogado defensor sostuvo que no puede existir homicidio agravado porque “si una persona intenta asesinar a alguien, lo último que va a hacer es llamar a una ambulancia para que lo asista”.
Además, citó lo dicho por uno de los testigos convocados por la defensa: “El colega de Balaguer dijo que su compañero lo salvó de ser agredido por (Víctor “Chucky”) Andrade”.
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