El primer paso fue dado por un grupo de amigos reunidos por Fidel Ayala, titular de la cervecería artesanal Yeska y el restaurant pub del mismo nombre, que se encontraron en el sitio del Paseo La Colina para el bautismo de fuego del club.
Con el preludio de música escocesa de gaita y tambor, el club tuvo su primera reunión con la guía espirituosa del experto Christian Tamburini, un conocedor y degustador de los que hay pocos en el país.
La primera sesión fue dedicada a Johnny Walker y tres productos excepcionales y muy diversos entre sí: el Golden Label Reserve, el Double Black y el legendario Blue Label, considerado por Tamburini como “mejor whisky del mundo”.
Pese a que Johnny Walker es el whisky más vendido del mundo y el Blue Label el preferido de los Premium, el club se dedicará a todas las marcas, conocidas o no, escocesas o de otro origen, y a todos los tipos, ya sea de malta, cebada, bourbons y de mayor o meñor añejado.
El mecanismo de degustación se basa en tres o dos whiskys por reunión, con dos vueltas. Una de ellas, la primera, puede hacerse según la preferencia con un poco de agua, para bajar el tenor alcohólico y percibir mejor aromas o sabores, y la siguiente puro.
Cada degustación tiene una introducción de Tamburini sobre la historia del whisky y la marca del momento, y su evolución en el tiempo, y luego todos comparten su análisis de la bebida.
La posibilidad de asociarse al club tiene dos opciones: el pago por mes de $ 300, con derecho a dos degustaciones como mínimo, con una cena; o de $ 200 por reunión, para conocer cómo es el tema, y adquirir la sociedad luego con $ 100 más.
(Económicas Bariloche)
Comentarios