Era de suponer que en algún momento del año la relación entre el argentino José María López y el francés Yvan Muller, compañeros de equipo en el Citroën Racing del WTCC, iba a comenzar a ser tensa ya que ambos están peleando por el título. El primer round se dio en la segunda carrera de Austria.
López ganó esa carrera y se afianzó al frente del campeonato con 41 puntos sobre Muller. Tanto por su tercer éxito del año, como por el abandono de su coequipier que se produjo a poco de la largada por un incidente en el que ambos fueron protagonistas.
El cordobés aseguró que en la partida mantuvo su línea y que Muller “intentó pasar por afuera, se quedó sin pista y se fue al pasto”. El galo, claro está, se mostró muy ofuscado por lo ocurrido en la pista e incluso por los dichos del cordobés. “La próxima seré yo el que mantenga mi línea”, afirmó el vigente campeón, que insiste en que fue Pechito el que lo obligó a despistarse.
“Entiendo que esté molesto, pero no sé por qué. La largada fue difícil, en un circuito difícil. Lo único que hice fue mantener mi línea, ni siquiera sentí un toque. Tratamos de correr lo más limpio posible. Considero a Yvan un amigo y estoy contento de trabajar con él. Y si él tiene algo que decirme, vamos a hablarlo”, retrucó López en declaraciones al sitio touringcartimes.com.
Sin dudas, esto le pone un poco más de picante a un campeonato en el que Citroën con sus C-Elysée hace lo que quiere.
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