La presidente Cristina Kirchner encabezó hoy la apertura de la edición 2014 del Salón del Libro de París, que tiene como principal país homenajeado a la Argentina, al cumplirse el centenario del nacimiento de Julio Cortázar. Allí aseguró que, después de España, Francia es el país con el que «culturalmente existe una mayor vinculación».
Al tomar la palabra luego de que lo hiciera el primer ministro galo, Jean-Marc Ayrault, la mandataria resaltó que los valores de la Revolución Francesa fueron retomados por quienes en la Argentina llevaron adelante la Revolución de Mayo, razón por la cual destacó las palabras del himno de ese país.
Subrayó los «lazos» que unen a ambos países y agradeció a las autoridades francesas por haber acogido a exiliados de la dictadura.
Cristina aseguró que es «un honor» que el país sea el invitado especial de esta edición de la prestigiosa feria y destacó a muchas de las figuras más prominentes de la cultura, como Jorge Luis Borges, Ernesto Sábato, Juan Gelman y Quino, entre otros.
Sobre Julio Cortázar, escritor cuya popularidad es particularmente fuerte en Francia, país donde vivió, dijo que además de la novela Rayuela el cuento «La Autopista del Sur» es su preferido. «Es un adelanto a la posmodernidad, a la sociedad de interconexión, a esa realidad que se choca y se mezcla y muchas veces no nos deja encontrarnos».
Y añadió que los intelectuales muchas veces tienen el rol de «marcar el camino y ver esas ideas que todavía no se han hecho carne en la sociedad».
La jefa de Estado, que arribó a Francia previa visita al Vaticano, comentó también que en su encuentro con el papa Francisco esta semana el Sumo Pontífice indicó que sería importante que se recuerde al escritor de origen francés Leopoldo Marechal. «Ambos compartimos el gusto por su obra», detalló.
«Quiero expresarles el eterno agradecimiento por la acogida que dieron a miles de argentinos. Y desearles a todos los escritores que hoy exponen toda la suerte del mundo», culminó.
La visita de la Presidente estuvo precedida por una fuerte polémica a raíz de la delegación de escritores que integró la comitiva oficial, que tuvo notorias ausencias que muchos atribuyeron a sus posiciones políticas críticas al kirchnerismo.
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