Arsenal goleó 3-0 a San Lorenzo para coronarse campeón de la Copa Argentina y conseguir así el pasaje a la próxima edición de la Copa Libertadores. Los de Sarandí abrieron el marcador gracias al tanto de Nicolás Aguirre, que aprovechó un error del arquero Sebastián Torrico, a los 36 minutos de la primera parte y en la segunda mitad lo definió gracias a los tantos de Mariano Echeverría y Emilio Zelaya, a los 9 y 20 minutos del complemento. El equipo de Juan Antonio Pizzi jugó con uno menos desde el final del primer tiempo por la expulsión de Ignacio Piatti.
El partido tuvo un comienzo trabado, los dos equipos salieron a disputar el control de la pelota en la mitad de la cancha y el partido se hizo parejo con posesión dividida. En medio del desorden la primera situación de riesgo fue para Arsenal, a los 7 minutos Furch tomó un rebote en el borde del área, se animó a pegarle y la pelota salió a centímetros del ángulo derecho de Torrico.
La llegada del equipo del Viaducto animó el partido y despertó al Ciclón que respondió a los 12 minutos con una gran jugada individual de Correa que dejó en el camino a tres defensores y no pudo definir con comodidad ante Campestrini que despejó el peligro al córner.
El equipo de Pizzi volvió a avisar a los 17 minutos con otra jugada profunda apelando a la velocidad de sus delanteros, Verón desbordó por la izquierda y luego de un rebote apareció Piatti que se acomodó en el área y sacó un remate bajo que Campestrini controló en dos tiempos.
De a poco el Ciclón se adueñó de la pelota y acorraló al equipo de Alfaro contra el arco de Campestrini pero le faltó claridad en los últimos metros ante un Arsenal que se replegó contra su área y se paró para lastimar de contragolpe.
Pero en el mejor momento de San Lorenzo llegó el gol de Arsenal, a los 36 minutos Aguirre aprovechó una mala salida de Torrico y le pegó de primera con la cabeza desde afuera del área para colocar la pelota por encima de todos y poner el 1-0.
Para colmo todo se complicó aún más para el Ciclón sobre el final de la primera mitad que se quedó con uno menos por la expulsión de Piatti, el volante le entró muy mal a Aguirre con una plancha a la altura de la rodilla y Delfino no tuvo más remedio que mostrarle la roja directa.
El segundo tiempo tuvo un comienzo similar al primero, San Lorenzo consiguió disimular el hombre de menos ante la pasividad de Arsenal que salió decidido a esperar en su campo y le facilitó las cosas al Ciclón que avisó a los 6 minutos con un potente remate de Romagnoli de media distancia que encontró una buena respuesta de Campestrini que despejó el peligro.
Pero otra vez en el mejor momento del Ciclón el que dio el golpe fue el equipo de Alfaro con una de sus especialidades: la pelota parada. A los 9 minutos Furch envió la pelota de cabeza al corazón del área chica tras un centro pasado y apareció Echeverría para empujar, de palomita, la pelota al fondo de la red para poner el 2-0.
El segundo gol fue un mazazo para las intenciones de remontada del Ciclón, que para colmo sufrió la salida de Verón, el único y más desequilibrante delantero que le quedaba, por lo que el resto del partido se repitió en intenciones pero con poca profundidad.
Y a los 20 minutos llegó el tercer gol de los de Sarandí que definió el partido, Zelaya tomó un largo pelotazo y aprovechó el desconcierto de la defensa del Ciclón para sacarse de encima dos marcas y fusilar a Torrico que no pudo hacer nada para evitar el 3-0.
Ya con el partido definido el segundo tiempo se fue diluyendo hasta el final, el Ciclón intentó empujar en busca del descuento pero sabiendo que la remontada era una utopía, mientras que de contra el equipo de Alfaro tuvo varias oportunidades para ampliar la diferencia pero tampoco gastó demasiadas energías en busca de otro tanto.
Arsenal refrendó su buen momento y fue más oportuno para superar a un San Lorenzo nervioso para ganarse el derecho a participar de la próxima Copa Libertadores, la Supercopa Argentina ante Vélez Sarsfield y sumar una estrella más a su corta pero exitosa historia.
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