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Mujica se adelanta a otra crisis por la exBotnia: «Nos quedamos sin margen»

El presidente uruguayo autorizó a la pastera a aumentar su producción. «Nadie va a separar de mi corazón el sentimiento hacia el pueblo argentino», aclaró.

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El presidente de Uruguay, José «Pepe» Mujica, aseguró hoy que su gobierno se quedó «sin margen para negociar» con la Argentina y afirmó que debe «cuidar el trabajo de los uruguayos», tras autorizar elaumento de la producción de la papelera UPM (ex Botnia).

Días atrás, Mujica se reunió con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en Puerto Madero. El encuentro no fue suficiente para atajar la controversia.

«Me duele mucho (esa decisión), esto puede crear tensiones y malentendidos, pero nadie va a separar de mi corazón el sentimiento hacia el pueblo argentino«, subrayó y aclaró que la autorización es «provisoria».

En tanto, el mandatario aclaró quese puede revocar si UPM no cumple en invertir con la construcción de una torre para bajar la temperatura de los desechos, además de bajar los niveles de fósforo en los efluentes que descarga en el río.

«Me siento federal y artiguista pero estoy en Uruguay y debo cuidar el trabajo de los uruguayos, en la cadena forestal», manifestó.

Según difundieron los portales de noticias uruguayos El Observador y El País, Mujica informó que se le habilitó un aumento de 100 mil toneladas, la mitad de lo solicitado por la empresa.

«Hemos autorizado a esta empresa a aumentar la mitad de los que nos había solicitado, aproximadamente 100 mil toneladas. En carácter provisorio, repito, en carácter provisorio y revocable, porque estamos exigiendo la instalación de una torre de enfriamiento para asegurar que los fluidos lleguen al río a una temperatura abajo de los 30 grados. Enfriamiento que debe procesarse sin diluir nada», dijo.

«Estamos poniendo como condición, el rebajar el contenido de fósforo que tiene precisamente el desecho que va al río», explicó.

«Desde el punto de vista jurídico, Uruguay está procediendo de forma correcta y que lo que está haciendo no merece ninguna objeción», consideró Mujica. «Nos quedamos sin margen para negociar», lamentó.

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