Publicado en

Ginóbili: «Estar en el Mundial depende de mí»

Emanuel Ginóbili dijo en diálogo con Infobae que su futuro en la Selección es incierto. Además, la palabra de Delfino, Prigioni y Pepe Sánchez, jugadores argentinos de la NBA.

Emanuel Ginóbili, Luis Scola, Pablo Prigioni, Carlos Delfino y Juan Ignacio Sánchez,cinco de los máximos integrantes de la Generación Dorada del básquet argentino, participaron ayer de una recepción de honor en la embajada de los Estados Unidosen el marco de la celebración del programa formativo de la NBA «Básquet sin Fronteras» y, en diálogo con Infobae, hicieron un balance de sus últimas temporadas, anticiparon lo que viene y respaldaron al plantel de la selección argentina que buscará en el Torneo de las Américas Caracas 2013 una plaza en el Mundial de España 2014.

Los jugadores fueron recibidos por Kevin Sullivan, encargado de negocios de la embajada norteamericana, como parte de la apertura formal del programa educativo y formativo de jóvenes organizado por la NBA para jugadores menores de 18 años representantes de 15 países de Latinoamérica y el Caribe.

Siempre cerca de la selección, los jugadores respaldaron al plantel que entre el 30 de agosto y el 11 de septiembre buscará en el campeonato FIBA de las Américas Caracas 2013 una plaza en el Mundial de España 2014.

Emanuel Ginóbili, quizá el máximo emblema de la Generación Dorada, manifestó: «Es una gran oportunidad para muchos jóvenes jugar el Premundial con rivales importantes. No tengo dudas que van a estar a la altura y van a hacer el mejor trabajo. En la Argentina hay material; por ahí va a ser difícil mantener el nivel de éxitos, hacer podios, pero hay chicos que trabajan muy duro, con talento, que están bien dirigidos y de gran conducta, que estarán ante una oportunidad única que creo que van a saber aprovechar».

En el mismo sentido se pronunció Carlos Delfino: «Los chicos tienen una chance única, hay muchos jugadores que vienen pidiendo pista, ojalá puedan clasificarse al Mundial y ojalá que el año que viene estemos todos juntos peleando por el título».

Prigioni, por su parte, instó a los chicos a «empezar a tomar la posta de la Selección», mientras que Juan Ignacio Sánchez les quitó presión a los jovenes:«Nadie espera que se les exija a los chicos que vienen ahora que puedan convertirse en una nueva Generación Dorada, ojalá que puedan hacerlo y que se les dé el tiempo y la tranquilidad que se nos dio a nosotros».

La transición en la selección argentina está en marcha. Los jugadores que hicieron historia de a poco le dejan el lugar a los que empujan desde atrás, pero hay uno, Luis Scola, que se mantiene como faro. Así lo destacó Ginóbili: «Luis viene siendo el líder de la Selección desde hace un tiempo ya, nosotros acompañamos pero él está siempre, es definitivamente el espejo a seguir y en quien se van a tener que apoyar los chicos».

El futuro de los íconos

Lo único cierto en la vida profesional de Ginóbili es que jugará un año más en la NBA en los San Antonio Spurs tras renovar su vínculo luego de la final perdida ante Miami Heat. El Mundial de España 2014, en caso de que la Argentina logre su plaza, no se asegura su presencia.

«Falta un año para el Mundial y a esta edad es difícil predecir qué va a pasar. Ya en la temporada que pasó me costó bastante físicamente, cada achaque duele un poco más, cuesta un poco más recuperarse y por eso es que no quiero prometer cosas que después no voy a poder cumplir. Cuando llegue el momento decidiré cómo estoy no sólo físicamente sino también mentalmente, cuántas ganas tengo de seguir jugando o si me retiro directamente».

Delfino, en tanto, sentenció su ausencia en el Premundial: «Descarto jugar en Caracas porque los plazos de la lesión me lo impiden (N. de la R.: sufrió una fractura en un dedo del pie derecho). No hay cosas mágicas para hacer las cosas que uno quisiera. Volver a estar en forma cuesta. Espero estar bien en forma para empezar la NBA en noviembre, a eso le apunto y sé que voy a llegar, pero con los tiempo ajustados».

Prigioni: sorpresa primero, ovación después

El contrato del argentino con los New York Knicks tomó a todos por sorpresa cuando nadie imaginaba al cordobés en la liga mayor. El público, desconfiado en principio, le brindó todo su cariño con el correr de los partidos y hasta llegaron a ovacionarlo en el Madison Square Garden.

«Estoy muy contento (por) cómo fueron las cosas; cuando firmé el año pasado tenía muchas dudas de si iba a poder hacerme un hueco en el equipo, y la verdad es queterminé jugando un montón y bastante bien, estoy contento de haber aceptado la oportunidad de jugar en la NBA y de haber prolongado el vínculo con el equipo de Nueva York».

La ovación en el Madison

«Fue una sorpresa, sabía que la gente me tiene cariño y que me respeta mucho, pero la verdad que ese día se dieron un conjunto de cosas, varias acciones buenas, y la gente me regaló su reconocimiento que será difícil de olvidar porque fue en una cancha mítica».

Acompañados por un equipo técnico de la NBA, los argentinos colaborarán durante tres días con las acciones comunitarias de la liga que desde la primera edición de «Basquet sin Fronteras», en 2001, llevan oganizadas 33 hasta el momento, que fueron celebradas en 20 ciudades de 17 países.

Comentarios