Publicado en

El Afsca privilegia la difusión de contenidos oficialistas

Los canales podrán cumplir con la exigencia de producción local transmitiendo series y telenovelas financiadas por el Estado

El Gobierno modificó hoy una disposición que obligaba a los canales de TV a producir contenidos locales: para cumplir con esa exigencia, prevista en la ley de servicios de comunicación audiovisual , se podrán utilizar desde ahora telenovelas, series, unitarios y documentales financiados por el Estado. Aunque les significará un ahorro considerable porque no deberán invertir en nuevas producciones, los canales privados podrán emitir libremente esos contenidos sin ningún tipo de contraprestación económica.

Según la resolución 2368/12 de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) publicada hoy en el Boletín Oficial , los medios podrán usar programas del Banco Audiovisual de Contenidos Audiovisuales Argentino (Bacua) y del Centro de Producción e Investigación Audiovisual (Cepia) para cumplir con la exigencia de producción propia local.

La resolución, que tiene fecha del 28 de diciembre de 2012 y lleva la firma del presidente de Afsca, Martín Sabbatella, sustitiye el artículo 3º de la Resolución 1348, por el siguiente texto: «Establécese que a los efectos del cómputo de las cuotas mínimas de producción local independiente establecidas en el artículo 65 de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, podrán considerarse los contenidos provistos por el Banco Audiovisual de Contenidos Audiovisuales Argentino (Bacua) y el Centro de Producción e Investigación Audiovisual (Cepia).»

El artículo 65 de la ley de medios prevé, entre otras cosas, que los medios privados «deberán emitir un mínimo del cincuenta por ciento de producción propia que incluya noticieros o informativos locales». Ahora, entre esos contenidos «propios» podrán haber materiales originados en el Bacua o en Cepia, bancos de recursos audiovisuales gubernamentales.

El Bacua es «una fuente de contenidos audiovisuales digitales disponibles tanto para los nuevos espacios de emisión como para los ya existentes, de libre acceso y de distribución gratuita», según se detalla en la página del Consejo Asesor de la Televisión Digital Terrestre, organismo gubernamental encargado de supervisar el desarrollo de la nueva TV abierta. Además, el Bacua cuenta «con una creciente cantidad de horas de contenidos audiovisuales originales obtenidas a partir de los distintos planes de fomento, vehiculizados a través de concursos abiertos para productoras independientes -con y sin antecedentes- de todas las provincias». Esos planes de fomento fueron financiados por el Ministerio de Planificación Federal y coordinados por el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa). En el Bacua hay 400 obras audiovisuales financiadas por el Estado, que totalizan unas 1126 horas de televisión, según los números oficiales.
contenidos a usar libremente

Entre los contenidos que los canales podrán usar libremente y considerar «producción propia» para cumplir la ley de medios, están:

Los Sónicos y Babylon (de GP Media, productora de Gastón Portal)

TV por la Inclusión (de la productora de Bernarda Llorente y Claudio Villarruel)

Maltratadas (de la productora Torneos y Competencias y América TV)

El Pacto (la historia oficial de la empresa de Papel Prensa, realizada por una cooperativa de trabajo)

Historia Clínica (de Underground Producciones, de Sebastián Ortega)

Entre las obras disponibles también está:

«Kirchner, relato de un presidente», un documental de Diego D’Angelo.

Por otra parte, Cepia es un centro de experimentación audiovisual de la Secretaría de Cultura, a cargo del ex cineasta Jorge Coscia, que impulsa «nuevas series y programas audiovisuales realizados por casas productoras seleccionadas a través de concursos».

Comentarios