En la localidad salteña de General Mosconi, el dueño de un gallo descubrió, no sin asombro, que el animal había puesto huevos. El caso no es el primero que se registra a nivel mundial. De hecho, el veterinario Rafael Rodríguez, informó que se trata de una patología producto de una malformación interna del animal, bautizado ‘Cleto‘ por su propietario.
La noticia suscitó tal asombro que llegó un equipo de Salta Capital a investigar y registrar el fenómeno, único caso hasta ahora en el país. El gallo es el único animal que quedó del corral, por lo cual el Dr. Rodríguez explicó que por una malformación en sus células, producto de una patología, que pone huevos ó bien, según otros estudios, ante la muerte de todas las gallinas, se activó en el sobreviviente el gen de todo animal primitivo, convertido así en la única alternativa de sobrevivencia de la especie.
Ante las suspicacias de la noticia, el periodista Juan Espinoza, registró el insólito suceso con fotos y videos, y afirmó que en las consultas que hizo con veterinarios pudo establecer que el animal es un gallo y no una gallina como se dijo por otros lados, dado a que a la gallina no le crece una cresta si cambia el sexo (fenómeno conocido como «reversión espontánea del sexo» que sólo ocurre de gallina a gallo).
La reversión espontánea del sexo en las gallinas es una patología que sucede por daños en el ovario izquierdo, ya que en aves normales sólo el ovario izquierdo es funcional, por lo que el ovario derecho prolifera y empieza a realizar funciones del testículo, principalmente producción de estrógenos y andrógenos. Pero aún así, la hembra sigue siendo hembra, pero con apariencia externa similar al gallo.