Héctor Baldassi y su positivo balance de Sudáfrica 2010

La consulta, aunque sea repetida e invite a la vulgaridad, es obligada por estos días: el frío. Y desde Salsipuedes, a 34km de la capital cordobesa, se escucha: «No, papá. Acá tenemos 33 grados». Héctor Baldassi hace una pausa y completa la broma: «¡Al lado de la caldera!».


Equipos, entrenadores y futbolistas tuvieron su balance mundialista. Para los árbitros, colectiva e individualmente, también. El representante argentino en Sudáfrica 2010 evalúa su desempeño y el de sus colegas en el certamen que terminó seis días atrás con la consagración de España. «El balance ha sido el mejor. Hemos sido felicitados por la FIFA por nuestra muy buena tarea, que fue de menor a mayor. Yo volví contento por dejar bien parado al arbitraje argentino», resume el cordobés.




-¿Sentís orgullo por tu tarea?



-Sí, tanto yo como mis compañeros estamos orgullosos. En lo personal no tengo nada que reprocharme. Estuve en lo máximo de mi carrera, como es un Mundial, y aporté mi porcentaje para que todo saliera bien.



-Ya te podés morir tranquilo…



-Sí, ya está. Y cumplí. Los equipos son los que ganan o pierden, pero creo que respecto de mi actuación, gané.




-¿Cómo se hace para encontrar nuevas motivaciones después de una experiencia así?



-Es una cuestión personal. Hay que cambiarse el chip y generar nuevas expectativas. El torneo local es el centro motivador para ponerse las pilas. Es un campeonato muy lindo, y además están la Libertadores y la Sudamericana. Siempre hay motivaciones.




-Después de tus primeras actuaciones, tus colegas decían que te habías adaptado al estilo FIFA.



-¿Por qué no decían que el resto se adaptó a lo que yo hacía, papá? Al contrario, yo siempre dirigí igual. No cambié mi forma de arbitrar, tanto que en el último partido que dirigí, España vs. Portugal, me estuve riendo todo el partido y me mostré con mi estilo distendido. Pude tener algunas ubicaciones que me sugirieron para mejorar y nada más. En el resto no cambié.




-Tu gran acierto del Mundial fue, en el debut, la mano en el penal para Ghana contra Serbia.



-Sí. La FIFA te da el primer partido y después tenés que ganarte el segundo. Por eso digo que estuve a cinco segundos de volverme a mi casa.




-¿La viste o te la marcó el asistente?



-La cobré yo. Y más que verla, la intuí. No vi bien el movimiento del jugador, por eso tardé unos segundos. El oficio de dirigir en la Argentina me ayudó a cobrar esa sanción.




-¿Qué opinás del arbitraje en el Mundial?



-De los 64 partidos, no hubo más que un 10% de errores. Sólo hubo problemas en cuatro o cinco cotejos. Pero más allá del gol no cobrado (en referencia al tanto del inglés Lampard ante Alemania) y la final, no hubo mayores problemas.




-Bueno, se trata nada menos que de la final.



-Es muy difícil opinar de un colega. Todavía no soy un ex árbitro. Uno se recibe de árbitro cuando deja de serlo. En la previa, Howard Webb estaba muy bien designado. Después, todo se resume en su frase: «Fueron las dos horas más terribles de mi vida». Eso da la pauta de lo duro que fue.




-Sobre lo que pasó con Lampard, ¿ya es hora de que la tecnología llegue al arbitraje en el fútbol?



-Soy esclavo de mis palabras y siempre dije que la única forma de ayudar a los árbitros es con la tecnología. Pero se entiende que la FIFA no legisla para algunas asociaciones, sino que legisla para todas.




-¿Pero a vos te parece necesario?



-Sí, en ese tipo de jugadas es indispensable. Lo sostuve siempre




-¿Qué Mundial tuvo un mejor arbitraje: Alemania o Sudáfrica?



-Fue parejo. Estoy convencido de que no hubo un peor arbitraje en Sudáfrica. Repito: no hubo grandes fallas.




El dolor por las críticas de Maradona



«Me dolió, fue discriminación. Fueron palabras poco felices y desubicadas. Pero no quiero hablar de nuevo de eso», dijo Baldassi sobre las críticas de Maradona a su tarea, que lo acusó de favorecer a España en el choque con Portugal y calificó a uno de los asistentes como «Andrea Bocelli».





Fuente: La Nación