Por brotes de sarampión: Controles a pasajeros que regresen de Sudáfrica

Autoridades del Ministerio de Salud dieron el alerta a los profesionales de la salud sobre la necesidad de “intensificar las acciones de vigilancia de las enfermedades febriles exantemáticas ante el retorno de personas provenientes de Sudáfrica”.


(Río Grande, 12 de julio de 2010) – Desde la Nación se observó que “en ese país se registran brotes de Sarampión en todas sus provincias, por lo que es necesario fortalecer las medidas de prevención y control ante la posible aparición de casos sospechosos”.


El Ministerio de Salud de la Nación recordó que “en el 2002, la transmisión endémica del virus del sarampión fue interrumpida en la Región de las Américas; y en el 2009, se logró la interrupción de la circulación del virus de la rubéola en muchos países de la Región”.


Advirtió, sin embargo, que “han sido reportados brotes de Sarampión en diferentes países de África, como Bostwana, Namibia, Sudáfrica, Suazilandia y Zimbabwe”, y remarcó que “desde enero del 2009, Sudáfrica ha reportado 9101 casos confirmados de sarampión y el brote se ha extendido a todo el país”.


Precisó que “las provincias más afectadas por el brote de sarampión son Gauteng, KwaZulu-Natal y Cabo Occidental”, por lo que en dicho país “ha sido planificada una campaña masiva de vacunación del 12 al 23 de abril, a fin de reducir el número de casos de sarampión al inmunizar a más de 14 millones de niños entre 9 y 15 meses de edad con vacuna”.


En lo que atañe a la Argentina, desde la Cartera sanitaria nacional se observó que como en este momento “se encuentran retornando al país personas que han viajado a Sudáfrica en ocasión del mundial de futbol, circunstancia que acrecienta el riesgo de reintroducción del virus del sarampión en el país”, se hace necesaria la “intensificación de la vigilancia Integrada de Sarampión/Rubeola”.


Recomendaciones


“Para prevenir la reintroducción de los virus del sarampión y el de la rubéola en la región, es necesario intensificar la Vigilancia Epidemiológica de casos sospechosos de sarampión/rubeola, en todos los sectores de atención de salud, especialmente en el sector privado que proporciona atención a personas con cobertura de salud, puesto que es posible que muchas personas que hayan viajado a África en ocasión del mundial de fútbol cuenten con dicha cobertura y por lo tanto consulten en ese sector ante la aparición de síntomas”, se agrega en el alerta enviado a todas las provincias argentinas.


A los trabajadores de salud del sector público, de la seguridad social y privados, se les exhorta a que ante “la posibilidad de ocurrencia de casos de sarampión/rubéola” se preste una “particular atención ante la aparición de pacientes con síntomas de la enfermedad”.


A la comunidad se le plantea “la necesidad de consultar rápidamente ante la aparición de los signos y síntomas de la enfermedad, en particular en personas que hayan viajado a zona afectada en los últimos 18 días”.


El Ministerio de Salud explicó que puede considerarse un caso sospechoso cuando el “paciente de cualquier edad, (especialmente si ha viajado o estado en contacto con personas que hayan viajado en los últimos 18 días a zona afectada), presente fiebre de >38ºC, anterior o durante el exantema, más exantema generalizado, más cualquiera de los siguientes catarros: nasal, bronquial u ocular”.


Como medidas a adoptar ante todo caso sospechoso, se planteó el “aislamiento”, remarcándose que “todo paciente ambulatorio con síntomas de la enfermedad deberá permanecer en aislamiento domiciliario”.


“Los niños no deben asistir a la escuela hasta una semana después de la aparición del exantema”, se agregó, para señalar luego que “en los hospitales, el aislamiento respiratorio debe ser estricto”.


“Todo niño de 6 meses o mayor hospitalizado, debe tener una o dos dosis de vacuna antisarampionosa, de acuerdo con la edad”, avanzó en la recomendación, además anotar que “los pacientes inmunodeprimidos hospitalizados, que pueden tener contacto con casos de sarampión, deben recibir gammaglobulina de pool”.


Qué es el Sarampión


Enfermedad vírica aguda potencialmente grave, transmisible y extremadamente contagiosa. Las manifestaciones clínicas son: fiebre, conjuntivitis, coriza, tos (triple catarro), exantema (como las manchas de Koplik) típico pero que no está presente en todos los casos, y erupción generalizada centrífuga, con espacios de piel sana que comienza en la cara, en la zona retroauricular y desciende al tronco y por último, a los miembros. Luego de 5 a 7 días se observa una descamación furfurácea.


Las complicaciones pueden ser por el mismo virus o por una sobreinfección bacteriana, e incluyen diarrea, otitis media, neumonía (es la causa mas común de muerte) y meningoencefalitis.


El agente etiológico es el virus del sarampión; pertenece a la familia de los Paramyxovirus, género Morbilivirus.


El reservorio es el ser humano.


El modo de transmisión es fundamentalmente de persona a persona, por diseminación de gotitas de Flügge (a través del aire). La presencia de aerosoles permite la transmisión aérea en lugares cerrados (consultorios e internaciones).


El período de incubación dura unos 10 días, y varía de 7 a 18 días desde la exposición hasta el comienzo de la fiebre, y unos 14 días hasta que aparece la erupción.


Constituye un riesgo para todas las personas que no han padecido la enfermedad o que no han sido inmunizadas.


No hay un tratamiento específico para los casos.


Aislamiento: los niños no deben asistir a la escuela hasta una semana después que apareció la erupción. En los hospitales, el aislamiento respiratorio debe ser estricto.


Las medidas preventivas se basan fundamentalmente en la vacunación oportuna de la población susceptible.


Realizar acciones de bloqueo ante la aparición de casos sospechosos, dentro de las 72 horas de captado el caso, a todos los contactos desde los 12 meses de edad a 40 años, y a todo aquel mayor de esta edad que manifieste no haber padecido la enfermedad.