Con importante afluencia de público y prensa, la firma presentó en sus salones el sorprendente producto, que llega desde Alemania para competir principalmente con el Volkswagen Tiguan. Se ofrece con una opción de motor, dos transmisiones y tres niveles de equipamiento.
El Kuga hizo su debut en público en el Salón de Ginebra de 2008 y tiene un diseño basado en la última tendencia de de la marca, el Kinetic Design. Su carrocería mide 4,43 metros de largo, 1,84 de ancho y 1,71 de alto. Comparte plataforma con el Focus y C-Max y tiene una distancia entre ejes de 2,69 metros.
Su motor es un naftero de 2,5 litros con turbo (de origen Volvo) que desarrolla 200 CV y que se podrá asociar a una transmisión manual de seis marchas (versión Trend) o a una automática secuencial de cinco denominada «5Tronic» (versión Titanium). Además, la tracción es integral y distribuye la potencia entre el eje delantero y trasero en una proporción variable según la adherencia.
En cuanto a su equipamiento hay tres niveles: Trend, Titanium y Titanium L. El primero dispone de botón de arranque «Ford Power», sistema de audio Sony con control de voz, reproductor de CD y MP3, conexión Bluetooth, faros antiniebla, airbags (frontales y laterales), ABS, control de estabilidad y tracción, llantas de 17 pulgadas, sistema de Atenuación del Riesgo de Vuelco (ARM), control electrónico de la distribución de la fuerza de frenada y control de velocidad crucero.
El Titanium agrega climatizador, sensor de estacionamiento y techo solar panorámico fijo. Por último, el Titanium L suma butacas calefaccionadas, tapizados de cuero y bandejas traseras.