«Brasil fue muy mezquino, jugó como un equipo de chico, pero con jugadores grandes», señaló Cappa, en otro de sus habituales y simpáticos juegos de palabra.< ?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />
En ese sentido, agregó sin tapujos que le llamó la atención que Brasil jugara «como Venezuela o menos, tipo Bolivia».
El director técnico, cuyo equipo marcha último en el torneo Apertura, señaló además que la selección argentina apenas «tuvo mala suerte». «Al principio recibió goles de pelota parada y después lo venció la ansiedad, la necesidad de ganarle a Brasil», aseguró en declaraciones a «La Tira Deportiva», realizada por alumnos de la Escuela Superior de Ciencias Deportivas rosarina.
«La Argentina juega así porque no tiene tiempo de entrenar. Es muy difícil jugar sin entrenar y tener un funcionamiento colectivo adecuado», justificó.
En ese sentido, y ante la obviedad de que Brasil dispuso de igual cantidad de días para preparar el encuentro del sábado pasado, Cappa manifestó que el equipo de Dunga «puso 9 jugadores delante del arquero, con Kaká y que Dios te ayude. A eso jugó Brasil».