Publicado en

Gendarmería intenta explicar los problemas en pasos fronterizos

Según la Fuerza, el incremento “exponencial” del turismo en la zona provoca las extensas demoras que los viajeros padecen en el control por los pasos fronterizos en Santa Cruz y Tierra del Fuego. Prometen que el largamente prometido control integrado mejorará la situación.

< ?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />

(Textual de < ?xml:namespace prefix = st1 ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:smarttags" />La Opinión Austral)

(Río Gallegos – 21/01/09) – El jefe de la Agrupación XVI de Gendarmería Nacional, comandante mayor Carlos Blanco, dijo que las directivas que hay en cuanto a los trámites que se realizan en la frontera son las mismas y los recursos son los que ya conoce la gente, “el problema es que año a año el volumen de personas que se mueve entre los pasos de Santa Cruz y Tierra del Fuego crece en forma exponencial”.

Como dato para abonar tal situación indicó que en el año 2007 estábamos en un 1,3 millones de personas mientras que en el 2008 llegamos a 1,8 millones de personas, “con lo cual hay medio millón más de personas moviéndose por esta provincia”.

En declaraciones realizadas ayer desde el paso de Monte Aymond al móvil de LU 12 Radio Río Gallegos, y al conductor del programa Era Hora, se le planteó el tema del sistema y cómo podría mejorarse un trámite que lleva hasta cuatro horas, incluso en días de semana, donde hay un solo mostrador para egresar e ingresar al país, con efectivos que realizan el trámite en colas donde se atiende a los que salen y los que ingresan, mientras que en el sector chileno hay un sector para atender cada grupo, tanto el que sale como el que entra y al menos aparece como más ágil.

Según sostiene el comandante Blanco, “las limitaciones que tiene Chile son prácticamente las mismas, lo que está faltando es la construcción del nuevo edificio del Paso de Integración Austral del lado chileno, para que hecha esa modificación comience a funcionar un control integrado y donde los tiempos para pasar por la frontera se van a reducir a la mitad”.

Frente a la insistencia en cuando a la posibilidad de un cambio en el sistema que ahora se emplea en el sector argentino, el jefe de la Agrupación dijo que “no, en la medida en que no se construya esa cabecera donde se va a dar entrada de un lado y salida del otro, lo que hace que la cantidad de público se reduzca a la mitad”.

Espera de una nueva licitación

Por su parte, el cónsul de Chile en Río Gallegos, Antonio Penna, en relación al mismo tema dijo que la solución de las demoras en la frontera, en parte, pasan por el inicio de lo que se denomina control integrado, para facilitar el paso de personas, vehículos y carga.

En relación al edificio que se deberá construir en la frontera, manifestó que por segunda vez está por lanzarse la licitación del Gobierno Regional de Magallanes, con el propósito de reestructurar el paso chileno. “Esperamos que estas dos medidas se concreten a la brevedad, para beneficio de las personas que lo ocupan”, al tiempo que señaló que llevará un tiempo considerando que por segunda vez se hará el llamado porque la primera licitación resultó desierta.

Respecto de las tan anunciadas medidas de integración en las que ambos gobiernos vienen coincidiendo desde hace años, pero que tardan en concretarse, acortando trámites y gestiones en distintos ámbitos que pasan tanto por el tema del tránsito de personas y particularmente el turismo, como para otros aspectos, Penna dijo que hay varias opciones que se analizaron en reuniones consulares de ambos países, donde se expusieron estos problemas en forma clara y precisa.

“Se está en eso, pero hay que recordar que todo lo relacionado con el tránsito de personas y vehículos entre los dos países se regula por las disposiciones y medidas que adoptan los gobiernos centrales”.

Pero en cuanto a los planteos de facilitar esto, temas que se vienen analizando y anunciando desde hace varios años, que al parecer no terminan de salir de los ámbitos burocráticos, el cónsul coincidió en que “esa es la gran pregunta”, al tiempo que sostuvo que “la gente que está involucrada, está consiente y que muchos de estos involucrados expresan su punto de vista y trasladan a las autoridades superiores las realidades que se viven en los distintos pasos, es algo que se da, en este sentido no se ve mejoría para el usuario, pero creo que han habido avances y estas medidas futuras van a permitir que se agilice un poquito más el trámite en los pasos fronterizos”.

El caso es que se realizan más trámites en estos pasos que cuando se egresa del país por otras vías, como la aérea, o incluso hay sistemas utilizados en otros países que son mucho más dinámicos, mientras que con la relación e intercambio que existe entre Argentina y Chile, todo parece más engorroso y esto además lo padece el turismo.

En este sentido también el cónsul coincidió en la apreciación. “Especialmente el turista lo vive, en momentos tales como vivimos de una crisis financiera internacional, los ingresos a las localidades que visitan son muy fuertes y tienen razón cuando plantean la parte engorrosa, eso ha sido dicho por un montón de personas y de hecho lo planteó el embajador argentino en Chile en la reunión que se efectuó en Ushuaia el año pasado, es un tema recurrente”, indicó.

Equipamiento

Estas declaraciones se realizaron en el marco de la presencia de un equipo de LU 12 Radio Río Gallegos y de La Opinión Austral en el Paso de Monte Aymond, donde fue puesto en funciones el nuevo jefe de la Seccional de Gendarmería, el segundo comandante Pablo Marín Lafayd.

También al nuevo responsable del Paso de Integración se le consultó sobre la tramitación y sistemas en la frontera. “Se tendría que trabajar tendiendo al control integrado, donde se realizaría un solo trámite, creo que hay una intención de la gente de Gendarmería, de Migraciones, Aduana y el Senasa, de agilizar los trámites para que el turista o el oriundo de la Patagonia que tiene que esperar en una cola de dos kilómetros, no se ponga molesto”.

Insistiendo en rever el caso de las colas que son las mismas para quien entra como para quien sale y si esto se puede mejorar, Marín Lafayd dijo que hay sólo cuatro máquinas para la atención al público, “que por allí es poco y tal vez deberíamos hablar de el doble de máquinas, cuatro máquinas obviamente con cuatro operadores”, indicó.