Una vez más, Jorge Uliarte, director de orquesta argentino, residente en Salzburgo se encuentra en Buenos Aires ultimando detalles para la IV edición del Festival Internacional de Ushuaia, del que es director artístico. A pasos del Colón, donde está cerrando la participación de la Opera de Cámara para el ciclo 2008, que se realizará entre el 5 y el 19 de abril, dialogamos con él.
Periodista: ¿Cuando concibió la idea de un festival en Ushuaia imaginó la repercusión que ha ganado aquí y en el exterior?
Jorge Uliarte: Esta es una idea que tuve hace exactamente veinte años atrás. Quería darle a la Argentina un festival internacional que se asemejase, en su calidad, a los que nosotros tenemos en Europa. Y siempre la Tierra del Fuego ejerció en mí una suerte de magia como para ser el lugar en que se realizara. Pensaba que debía ser un festival muy original para que pudiese sorprender. Si lo hacía en otro lugar de la República, probablemente no hubiese prendido como prendió en Ushuaia. Ignoro qué pasa en la Argentina, pero supongo, que el país ya tiene una posición con respecto a él. Pero en Europa, a través de mi esposa [presente en la entrevista] y de un grupo de periodistas muy amigos que nos pusieron el hombro, hoy el festival tiene una repercusión muy importante.
P.: Entonces, Ushuaia no tenía la infraestructura que tiene hoy.
J.U.: Exacto. Primero lo que hoy es una Provincia, era un Territorio Nacional; segundo, si había uno o dos hoteles era mucho. Entonces tuvo que pasar el tiempo y encontrarme con Hernán Román, que ahora es el director general, al que le planteé la idea. Cuando él vio que era posible, hablamos con el alcalde de Salzburgo, un querido amigo, que nos proporcionó un apoyo institucional muy fuerte. Se habló también con el Centro von Karajan de Viena, con el Ministerio de Cultura de Austria y se consiguieron todos los apoyos de la Argentina (desde la Presidencia de la Nación a diversas instituciones), lo que nos permitió encontrar importantes auspiciantes, que hicieron que el festival fuera una realidad, ya que el costo de hacerlo es muy grande.
P.: ¿Cómo respondieron los fueguinos?
J.U.: La primera edición fue en el 2005, con la actuación de la Orquesta de Salta. La sorpresa que nos dio el público fue estupenda: concurrieron 12.000 personas. Entonces, para darle un matiz internacional al festival, hablé con el primer violín de la Filarmónica de Viena.
Vino, tocó como solista y dictó un seminario. También contamos con artistas que tienen muy buena predisposición para venir, y que por una cuestión de mercado no son demasiado conocidos aquí. Entonces, junto con los auspiciantes, nos planteamos elevar la apuesta y traer una orquesta europea, con todo lo que ello significa: pasajes de avión, seguros de instrumentos, etcétera. Trajimos una orquesta sinfónica de Praga y los espectadores ya fueron 17.000.
P.: Para ese entonces lo nombraron director artístico de la Orquesta Sinfónica de Berlín
J.U.: Sí, y acordamos traerla. Esta vez tuvimos 22.000 personas, con 17 por ciento de europeos, porque el festival se promociona mucho en Europa. Pronto tuvimos dos buenos pianos y se mejoró ostensiblemente la acústica de la sala del Hotel Las Hayas donde se realiza. Pero, nuestra filosofía es que aquel público fueguino que no pueda acceder a los conciertos pagos en la sala del Hotel, puede escuchar exactamente lo mismo, ya que hay repeticiones en el Polideportivo, con entrada libre para todo el mundo.
P.: ¿Cómo es eso de formar una orquesta para el festival 2008?
J.U.: Se creará la Orquesta Filarmónica de Ushuaia. Yo la voy a dirigir y estará integrada por músicos de diferentes países de Europa y, por supuesto, de Argentina. Habrá asimismo grupos de cámara, solistas y un ensamble de la Opera de Cámara del Teatro Colón que hará un programa Pergolesi. Algunos de los artistas que tocarán en el Festival son Christine Marie Holler, Goran Filipec, Valentina Babor, Valentín Surif, Alberto Portugheis, y los cantantes Leonardo López Linares y Andrea Maragno, entre otros notables.
P.: ¿Y cómo sigue su propia carrera internacional?
J.U.: El 16 de marzo toco en Berlín, la versión completa del Concierto para cello de Offenbach, una obra que recién acaba de ser reconstruida con materiales encontrados en distintas partes del mundo. Por otra parte, el 22 de mayo voy a dirigir a la Royal Philharmonic Orchestra, en el Royal Festival Hall de Londres, con un programa que incluye a Bizet, Albéniz y Manuel de Falla. Y, como es lógico, ya estoy pensando en el Festival de Ushuaia 2009.
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