«En las conversaciones que veníamos teniendo sobre qué cosas íbamos a pedirles, esta era una medida que veíamos que tenía cierto consenso», afirmó el funcionario en declaraciones al canal América.
Señaló que en la tarde del lunes, después de haber tomado la decisión de eliminar el FFS junto al presidente Mauricio Macri, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, se tomó el trabajo de llamar a «buena parte» de los gobernadores para comentarlo, y «hubo mucha comprensión».
Por ello, el funcionario aclaró que la decisión de eliminar el Fondo Federal Solidario fue del Gobierno y aseguró que «de ninguna manera» se trató de un pedido del Fondo Monetario Internacional (FMI).
«De ninguna manera el Fondo nos pide un ajuste o nos dice como hacerlo. El programa (macroeconómico vigente) es nuestro programa», aseguró el funcionario al descartar que el FMI esté teniendo incidencia en el manejo de la política económica.
Dujovne dijo que la eliminación del Fondo Federal Solidario, que se conformaba con el 30% de los recursos provenientes de las retenciones a las exportaciones de soja, se venía hablando con «casi todos» los gobernadores.
Esos diálogos se vienen dando, según precisó el funcionario, en el marco de la discusión acerca de cómo debe ser el proyecto de Presupuesto 2019 que él enviará al Congreso antes del 15 de septiembre.
El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, es quien viene manteniendo las conversaciones con los mandatarios provinciales, algunos de los cuales mostraron ayer su sorpresa por la eliminación del FFS.
«En el contexto de un deterioro en los precios de los bonos de la Argentina y una suba del Riesgo País, yo dije: adelantemos la parte del Presupuesto (2019) que podemos hacer ahora para ir mostrando que el Presupuesto no es algo binario», explicó Dujovne.
Por ello, el funcionario tomó la decisión de eliminar el FFS, recortar 66% los reintegros por exportaciones y congelar por seis meses las bajas de las retenciones a los productos derivados de la soja, como el aceite y la harina.
Dujovne explicó que la idea oficial es que las alícuotas del poroto de soja y de los derivados de la oleaginosas se unifiquen y sigan bajando juntas a partir de febrero de 2019, llegando al 18% en diciembre del año que viene «y eso ya no se modifica».
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