La cuarta fecha del campeonato encontró a dos equipos que tardaron en conseguir su primera victoria. Tras las desilusiones que vivieron en sus dos primeros compromisos, Banfield y Tigre se recuperaron ante los grandes del fútbol doméstico y demostraron que en el Florencio Solá,intentaron seguir por la senda del triunfo.
En los primeros movimientos del partido, la velocidad de Juan Cazares fue la herramienta que más empleó el conjunto de Matías Almeyda. Un desborde del ecuatoriano, y una descarga haciaNicolás Domingo, le dio la posibilidad al ex River de probar desde el borde del área grande. Pero la buena ubicación de Javier García evitó lo que pudo haber sido la prematura conquista de la tarde.
En contraposición, la habilidad de Lucas Menossi fue lo más destacado del elenco de Fabián Alegre. A pura pisada, el de Beccar se asoció con Carlos Luna, para que el «Chino» ponga en jaque al arco defendido por Gaspar Servio. Sólo por la escasa puntería del delantero, la visita no rompió el marcador. Si bien al choque le faltaba dinamismo, ambos habían hecho méritos para llegar a la red.
En tanto, la jerarquía de Santiago Salcedo fue fundamental para que se establezca el tanto inicial. Tras juntarse con Ricardo Noir y «Juanito», el paraguayo amenazó con quebrar a la sólida defensa del «Matador». Por lo tanto, a los 25 minutos de juego, el oriundo de Asunción se deshizo de sus marcas y con un tiro cruzado festejó el 1 a 0. El grito del guaraní provocó un giro muy notorio en el espectáculo, sobre todo por la actitud de los hombres de Tigre, ya que sus reclamos por la posición adelantada del ex Lanús fueron ignorados por Pablo Díaz.
Antes de que se vayan al descanso, una excelente triangulación entre Lucas Wilchez, Kevin Itabel y Luna mereció concluir en el empate parcial. El taco del platense, el preciso centro que ejecutó el de Escobar y el punzante cabezazo del «Chino» terminó en el techo de la valla local. Nuevamente, la fortuna estuvo teñida de verde y blanco, aunque en el contragolpe, los del «Pelado» estuvieron muy cerca de estirar la ventaja. La rápida respuesta de Javier García volvió a ser determinante para que Salcedo no vuelva a convertir.
En el complemento, los de Victoria apostaron por la individualidad de Lucas Wilchez para emparejar el duelo. Las constantes intervenciones del volante pusieron en peligro al arco de Servio, pero la falta de efectividad en la definición de sus jugadas mantuvo a Banfield en ventaja. Además, los contragolpes protagonizados por Juan Cazares fueron los argumentos más sólidos para liquidar el pleito. Con sus tiros de larga distancia el ecuatoriano hizo temblar el travesaño y el palo, para aportar una carga de suspenso en un espectáculo que fue creciendo con el transcurso del tiempo.
Con la victoria consumada, Banfield logró quebrar el maleficio que tenía en su propia casa, ya que tuvieron que pasar más de 1000 días (14 encuentros) para que el «Taladro» vuelva a sumar de a tres en su estadio. La entidad del sur del conurbano bonaerense llegó a las seis unidades y se anima a acercarse a la cima. En cambio, Fabián Alegre no consiguió repetir lo que había hecho con Racing, tal vez lo haga el próximo lunes cuando se enfrente a Quilmes en el José Dellagiovanna.
Fuente: Fernando Taveira – Infobae
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