Casi al borde de la cesación de pagos, el ministro de Economía, Axel Kicillof, llegó a Nueva York para reunirse con Daniel Pollack, el mediador designado por el juez federal.
El ministro viajó desde Caracas, donde acompañó a la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner a la reunión de mandatarios del Mercosur, para sumarse a las reuniones con el mediador Daniel Pollack, que continuaban ya entrada la noche.
Argentina avanza de a pasos muy lentos, en el tenso camino por la cornisa,que la tiene a medio centímetro de caer en un estrepitoso default. Y la agonía se prolongará hasta el miércoles a última hora, luego de que la decena de reuniones entre los funcionarios argentinos y los fondos buitre fracasaran, una y otra vez, durante las tres semanas de negociación.
El ministro de Economía Axel Kicillof estuvo reunido hoy por más de ocho horas con el mediador Daniel Pollack en Nueva York. El funcionario viajó de urgencia tras acompañar a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la Cumbre del Mercosur, a donde viajó para buscar apoyo regional.
Es que en cualquiera de los escenarios que le sigan al miércoles 30 de julio, la estrategia de la jefa de Estado fue recolectar fotos con pares de otros países, para enviar mensajes de respaldo a la comunidad financiera internacional.
En esa línea, que llevó a Cristina a recibir a Vladimir Putin (Rusia) y Xi Jinping (China) -con quien firmó un acuerdo de intercambio de moneda-, la Presidenta participó hoy de una reunión con Dilma Roussef (Brasil),Nicolás Maduro (Venezuela), José Mujica (Uruguay) y Horacio Cartes(Paraguay).
La mandataria argentina llevó a Caracas sus críticas al juez Thomas Griesay despotricó contra los fondos buitre, a los que mostró en oposición a Rusia y China.
“Hoy está abierto nuevamente el canje, para ofrecerle a este 7,6 por ciento(de los acreedores) que no ingresó, que ingrese. Si ingresara tendría una tasa de retorno de casi 300 por ciento en dólares. No estamos pidiendo que nadie nos regale nada, simplemente queremos definitivamente terminar con esto”, convocó la Presidenta.
La Presidenta habló de la “verdadera agresión de los fondos especulativos” y advirtió que “agitar el default no tiene sentido porque eso es cuando uno no paga y la Argentina paga”.
“Intenta asustarnos con que si no hacemos lo que nos dicen ellos que tenemos que hacer, se nos van a venir las diez plagas de Egipto. Bueno, miren, ya las vivimos en el 2001 cuando precisamente otro gobierno hizo lo que le dictaban desde afuera”, resaltó Cristina Fernández.
La Presidenta apuntó a Griesa al advertir que “retuvo bajo ninguna figura legal” los fondos que Argentina depositó para cubrir el pago de los tenedores de bonos reestructurados.
“No hay figura legal, jurídica, ustedes saben que para que alguien retenga fondos de terceros tiene que haber una figura legal. Los fondos están inmovilizados sin que nadie decida sobre ellos y sin poder llegar a sus legítimos dueños, que son los tenedores de bonos reestructurados”, cuestionó.
Cristina Fernández agregó que “no se entiende” el accionar del magistrado neoyorquino porque, detalló, “la idea que tenemos de un juez, es la de alguien que es imparcial, pero esto no es lo que está sucediendo a punto tal, que autorizó a un banco norteamericano a pagar (bonos Discount en dólares bajo legislación argentina) y no así” a otras entidades.
“¿Cómo se llama el proceso jurídico donde un juez autoriza a pagar a uno sí y a otros no? Una de las claves del derecho occidental, o por lo menos así lo hemos escuchado, es que ante igual situación, igual derecho y tratamiento igualitario entre las partes y demandantes”, cuestionó, en el país caribeño.
Pero también hubo novedades que llegaron desde el mismo suelo argentino. Mientras una de las preocupaciones de la economía argentina gira en torno a dónde saldrán los fondos para pagarle a los buitres, el Banco Central (BCRA) salió a aclarar que, con las negociaciones avanzadas, no está al tanto de nada.
Así lo expresaron a la agencia de noticias DyN fuentes de la autoridad monetaria, quienes salieron al cruce de versiones que asignaban al presidente de la entidad, Juan Carlos Fabregas “conocimiento relativo a una gestión de bancos privados” para solucionar el diferendo.
Cada “fumata negra” que llega desde Nueva York repercute en el dolar informal que cedió hoy 20 centavos ó 1,54 por ciento a 12,80 pesos para la venta, mientras el que se ofrece en el promedio de bancos y casas de cambio de esta ciudad subió un centavo a 8,21 pesos, en una rueda en que el Banco Central compró 50 millones de la divisa estadounidense.
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